La Procuraduría General de la República (PGR) presentó 82 pruebas contra Javier Duarte y pidió a un juez federal no dejarlo en libertad porque, de lo contrario, se mandaría un mensaje de impunidad a gobernadores implicados en hechos de corrupción.
El funcionario afirmó que el ex gobernador con sus presuntos desvíos y operaciones de lavado vulneró la seguridad nacional y el sistema financiero.
La PGR imputó hoy a Duarte el desvío de mil 670 millones de pesos a empresas fantasmas, las cuales transfirieron el dinero a otras compañías de las mismas características, con el propósito de perder el rastro del dinero y destinarlo a los prestanombres del ex mandatario, como Moisés Mansur y Alfonso Ortega.
Ambos comprarían terrenos, departamentos, un yate, ranchos y diversos bienes, de los cuales disfrutó Duarte.
Entre los 82 datos de prueba exhibidos hoy por la PGR aparece el testimonio de José Juan Janeiro Rodríguez, principal ‘cerebro’ financiero de Duarte y quien se acogió al criterio de oportunidad para colaborar con la dependencia en las investigaciones
Janeiro, abogado fiscalista, declaró el pasado 2 de febrero que Duarte contrató sus servicios para tratar de resolver un problema de comprobación contable por 350 millones de pesos del erario.
La PGR expuso desde las 10:00 horas hasta las 15:20 horas todos sus datos de prueba contra el acusado.
Enseguida, el juez Gerardo Moreno García acordó un descanso y la audiencia se reanudó a las 16:40 horas.
Una vez reiniciada la audiencia de vinculación a proceso, la defensa de Duarte expondrá las pruebas de descargo. Sus abogados ofrecieron como prueba citar a declarar a Alfonso Ortega López, uno de los principales prestanombres y delatores del ex gobernador, sin embargo, éste no asistió.
El juez de control Moreno García advirtió durante la audiencia que ordenará el arresto administrativo de Ortega López si no justifica su ausencia, ya que fue debidamente notificado del citatorio.