Unas 30 escuelas de la región de la Tierra Caliente de Guerrero, en la frontera con Michoacán, han suspendido clases debido a la inseguridad que se vive en la zona.
Los maestros piden que se dé mayor vigilancia en los planteles para no seguir siendo víctimas de extorsión o secuestro por parte de los grupos del crimen organizado que operan en la región.
En la mayoría de casos, los maestros no son originarios de los lugares, llegan a la cabecera municipal y de ahí se trasladan en diferentes medios de transporte a las comunidades asignadas, las cuales se encuentran muy alejadas del centro municipal.
En ocasiones anteriores se han presentado casos donde debido a problemas de inseguridad se suspenden clases en esta región ubicada en los límites con Michoacán.
A principios de enero de 2016, cinco maestros, incluido el director de una secundaria, fueron secuestrados por hombres armados en una comunidad de Ajuchitlan del Progreso y retenidos por casi una semana; los delincuentes pidieron a los familiares rescate. Incluso así, el director de la escuela fue asesinado.
El secretario de Educación de Guerrero, José Luis González de la Vega, reconoció que las zonas del estado donde hay problemas de cierre de escuelas por inseguridad en estos momentos, son la zona de la Tierra Caliente y en el municipio de Zitlala, aunque en este último lugar el problema ya se resolvió
En la comunidad Tlaltempanapa, del municipio de Zitlala, ya reanudaron labores este lunes, luego de cinco meses de estar cerradas por la inseguridad y violencia, debida a la disputa entre grupos de la delincuencia organizada.
El delegado regional de la Secretaría de Educación de Guerrero, Jerónimo Maurilio Morales, informó que este lunes reanudó labores la última escuela que permanecía cerrada en esa localidad, perteneciente al municipio de Zitlala en la Montaña de Guerrero.
Excelsior