Más de 31 mil ciudadanos solicitan al Presidente Enrique Peña Nieto y a la Secretaria de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu recibir a 10 mil sirios en calidad de refugiados, luego de la guerra que atraviesa Siria y que ha provocado un éxodo masivo a nivel global que no se veía desde la Segunda Guerra Mundial.
La petición, que fue lanzada en la plataforma Change.org, destaca la generación de españoles que fueron recibidos al final de la década de los 30 del siglo pasado e hicieron de México su país.
Refiere que México debe ejercer su liderazgo de una manera humanitaria y ésta es la oportunidad para hacerlo.
La guerra que atraviesa Siria, donde combaten fuerzas rebeldes, milicias terroristas y fuerzas oficiales, persiste desde 2011 y ha ido cobrando un carácter cada vez más cruento. Al transitarse el quinto año de conflicto armado muchos pobladores han perdido la esperanza de que se halle una solución.
Muy por el contrario, la destrucción en el país parece ser cada vez mayor: mientras la milicia terrorista Estado Islámico intimida a cristianos y otros grupos y expande el territorio bajo su control, el régimen lanza ataques por aire contra fuerzas insurgentes y también da contra civiles.
Según la portavoz de la agencia de Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR), Karolin Eberle, los ciudadanos que han huido de sus viviendas querían regresar a su hogar una vez concluida la guerra civil, pero, con el paso del tiempo, han perdido la esperanza de poder dar ese paso.
A eso se suma que la situación en los campamentos para refugiados armados en países vecinos es cada vez más difícil. Muchos sirios que se encuentran en Turquía cuentan que viven en malas condiciones, que no tienen ninguna perspectiva y que sus hijos no pueden ir a la escuela.
Las organizaciones de ayuda como ACNUR están recibiendo pocos fondos teniendo en cuenta la magnitud del problema. En muchos casos ni siquiera pueden proveer a los refugiados con lo esencial.
El pasado 2 de septiembre se difundió la imagen en video del cuerpo sin vida de Aylan Kurdi, un niño sirio en la orilla de una playa de Turquía, la cual ha sido mostrada al mundo como símbolo de la tragedia que viven los inmigrantes que cruzan el mediterráneo en busca de una vida mejor.
La familia Kurdi escapó de esa ciudad, sitiada durante meses por el grupo yihadista Estado Islámico, en un intento de emigrar a Canadá, donde vive una tía del pequeño.
Aylan, su hermano y su madre se encontraban entre los doce sirios que murieron ahogados en el mar Mediterráneo hace tres días, después de partir de la ciudad turística turca Bodrum.
Fuente: SinEmbargo