Sebastián Piñera, presidente de Chile, pidió este sábado la renuncia de todo su gabinete, esto para cumplir con las demandas expresadas en las protestas que se viven en el país.
El mandatario, en un mensaje a medios, también propuso terminar con el estado de emergencia en el país tras un diálogo que tuvo con las fuerzas armadas y del orden.
«Quiero anunciar a todos mis compatriotas que, si las circunstancias lo permiten, es mi intención levantar todos los estados de emergencia a partir de las 24:00 horas del próximo domingo, de forma tal que podamos contribuir a esa normalización que tanto quieren y merecen los chilenos», explicó.
El mandatario habló sobre la marcha del viernes en Santiago, que reunió a más de un millón de personas, y reconoció que el Gobierno ha «escuchado el mensaje».
«Todos hemos cambiado y ahora tenemos que unir fuerzas para dar respuestas verdaderas y responsables a esas demandas sociales», apuntó.
Las protestas en Chile iniciaron hace ya más de una semana, por un alza en las tarifas del transporte subterráneo. A este motivo se unió la disconformidad por un aumento en los precios del agua y la luz, así como por la difícil situación económica que afectan a los adultos mayores, el sector más pobre del país.
El 18 de octubre, se registraron actos contra más de 70 estaciones del servicio de transporte en Santiago, por lo que las autoridades decretaron un estado de emergencia para la ciudad.
Un día después, Piñera anunció la cancelación del alza en el precio del transporte, pero el Ejército decretó el toque de queda para la región metropolitana de Santiago.
El martes, Piñera anunció un aumento inmediato de 20 por ciento en la pensión básica solidaria, un ingreso mínimo garantizado de 350 mil pesos chilenos (9 mil 500 pesos mexicanos), así como impuestos a los ricos.
El número de muertos desde el inicio de las manifestaciones es de 19, de acuerdo con las autoridades.
Con información de Bloomberg