Conecta con nosotros

México

Presenta ISSSTE su plan de austeridad

Published

on

Como parte del plan de acción de medidas de austeridad que ejecutará el ISSSTE ante la coyuntura económica del país, el Director General del Instituto, José Reyes Baeza Terrazas, anunció que se espera lograr economías de alrededor de los mil 500 millones de pesos al término del ejercicio fiscal 2017.
Los rubros que abarcarán dichas acciones son: servicios personales, eficiencia administrativa, ahorro energético y de impacto ambiental, implementación de nuevas tecnologías en administración de medicamentos y servicios, estableciendo medidas de contención del gasto de operación de la administración del Instituto que generen economías, sin que se afecte la calidad y oportunidad en la prestación de los servicios y la ejecución de los programas que se otorga a los 13 millones de derechohabientes.
Asimismo, el Director General detalló que el gasto pensionario está garantizado y apuntó que su evolución desde 2013 a 2016 significó un incremento de 50,080.6 millones de pesos. En 2017 se espera un crecimiento de 18,061.5 millones de pesos al cierre del ejercicio, lo que significará un presupuesto estimado de 190,000 millones de pesos.
Reyes Baeza destacó que el gasto real del Instituto, del 2016 fue igual al ejercicio de 2013, cubriendo el pago de 6,497 plazas adicionales en las ramas médica, paramédica y de atención a los derechohabientes; además de abarcó 34 obras nuevas y 195 acciones de ampliación y remodelación de la infraestructura del Instituto, lo que refleja un manejo responsable de los recursos asignados.
El titular de la dependencia detalló que entre los puntos en donde el impacto de ahorro se reflejará de manera importante se encuentran las compras consolidadas de medicamentos y materiales de curación (731 millones de pesos), seguida en la reducción de los gastos de operación y compras en las delegaciones estatales y regionales (250 millones de pesos); en la consolidación del Sistema de Unidosis para maximizar el aprovechamiento de medicamentos a través de nuevas tecnologías (200 millones de pesos), a través de nuevos mecanismos para la administración de imágenes radiológicas, así como en servicios de oftalmología y desinfección de áreas hospitalarias (200 millones de pesos).
En materia de servicios personales habrá una reducción del 10 por ciento en las percepciones de los mandos superiores; así como la disminución de 12 por ciento en plazas eventuales administrativas y del 10 por ciento en honorarios no vinculados a servicios médicos”, sin afectar el otorgamiento de las 21 prestaciones.
En eficiencia administrativa habrá un decremento en las unidades vehiculares destinadas a actividades administrativas y se priorizarán las destinadas a brindar servicios médicos, con el consecuente ahorro de combustible y mantenimiento; además se implementará un programa de optimización de espacios que genere economías en el gasto de arrendamiento de inmuebles, además se privilegiarán automóviles de menos cilindros para ahorro de combustible.
Asimismo se reducirán los viáticos nacionales, dando preferencia a las comunicaciones a través de medios electrónicos y videoconferencias; así como limitar los viáticos al extranjero, salvo en los casos en que estén debidamente justificados para el cumplimiento de los objetivos institucionales.
También se promoverá el uso tecnológico de tableros de control para optimizar los recursos a partir de información puntual sobre productividad y eficiencia operativa; y el fomento del desarrollo de aplicaciones, comunicaciones y seguridad informática para evitar gastos de transportación innecesarios.
En eficiencia energética e impacto ambiental se privilegiará el uso de nuevas tecnologías para el ahorro en el consumo de energía eléctrica y concientizar al personal de mantener las luces y equipos de cómputo apagados cuando no se requieran; y, finalmente medidas para optimizar el confinamiento y recolección de desechos; políticas de racionalización del uso de agua y papel.

México

Senado aprueba Ley General de Aguas en medio de acalorado debate y críticas de oposición

Published

on

El Senado mexicano aprobó este jueves, con 85 votos a favor y 36 en contra, el proyecto de decreto que expide la Ley General de Aguas y reforma diversas disposiciones de la Ley de Aguas Nacionales, en un contexto de creciente presión sobre los recursos hídricos del país por sequías, conflictos por concesiones, crecimiento urbano y alta demanda del sector agrícola.
La minuta fue remitida al Senado por la Cámara de Diputados, que la aprobó tras 24 horas de acaloradas discusiones. La iniciativa deriva de una propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum para regular el derecho humano al acceso, disposición y saneamiento del agua, así como priorizar su consumo humano y doméstico ante autorizaciones, permisos, concesiones y asignaciones del recurso.
El senador Óscar Cantón Zetina, de Morena, aseguró que el centro de este proyecto es la persona y no los grandes acaparadores de agua, pues se crea un trinomio virtuoso entre tierra, agua y gente. Afirmó que la legislación es la mayor aliada de los productores y campesinos de México, ya que elimina la visión mercantilista del agua y la regresa a su dueño legítimo, que es el pueblo de México.
La senadora del PAN, Verónica Rodríguez, señaló que esta reforma convierte el agua en un instrumento de manipulación política y electoral. Apuntó que le da al gobierno federal la posibilidad de decidir de manera discrecional quién mantiene su concesión, quién la pierde, a quién le reducen volúmenes de agua y a quién sí le permiten operar, lo que demuestra que es peligroso para la democracia, el campo, la seguridad alimentaria y las familias.
Carolina Viggiano, del PRI, advirtió que el proyecto no contó con estudios económicos ni presupuestales, no cuenta con análisis de impacto financiero y tampoco se asegura inversión para la infraestructura, operación ni vigilancia de los sistemas de agua. Además, señaló que no se consultó a los pueblos originarios.
Luis Donaldo Colosio, de Movimiento Ciudadano, indicó que los cambios abren la puerta a más control gubernamental sin contrapesos reales, a más trámites y a más incertidumbres para el campo mexicano. Afirmó que se concentran atribuciones en la Comisión Nacional del Agua sin reglas claras, crece el riesgo de arbitrariedad, corrupción, favoritismos y castigo político, además de que se crea incertidumbre en la asignación de derechos y volúmenes, lo que desincentiva la inversión, la tecnificación y frena proyectos.
La nueva Ley General de Aguas establece que las concesiones para el uso del vital líquido no podrán ser intercambiadas entre particulares, con la obligatoriedad de que sea la Conagua la que las distribuya de nuevo.
La discusión y aprobación en las Cámaras de Diputados y Senadores ocurre en un contexto donde el sector agrícola consume cerca del 75 por ciento del agua disponible para consumo en el país.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto