Alumnos del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Vallejo, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) exigieron la destitución de la coordinadora jurídica del plantel, Eunice Velázquez, por actuar con negligencia al atender el caso de violación de una estudiante en las instalaciones de la cafetería Cibarium, ubicada dentro de la escuela, pues ahora el agresor quedó en libertad y la joven fue revictimizada y criminalizada.
En una rueda de prensa, la alumna de dicho plantel, María del Carmen contó: «Nuestra compañera está asustada, apenas se está reintegrando a clases, pero cada vez que sale de su casa entra en pánico porque ese tipo anda libre, porque hubo negligencia de las autoridades jurídicas que tenemos en el plantel».
La alumna de 16 años fue víctima de abuso sexual el pasado 12 de febrero en los baños de la cafetería del platel. Luego de la agresión, en shock con lesiones en el cuello, la joven se dirigió al salón de clases. Ahí, informó a sus compañeros que un empleado la había agredido, por lo que fue canalizada con el jurídico del CCH Vallejo, explicó Silvana Ornelas Tapia de la Asociación Amor no es Violencia, a quien acudieron varios estudiantes en busca de apoyo y asesoría ante el caso.
«A partir de ese momento las autoridades se deslindaron como siempre y criminalizaron a la menor al cuestionar sus calificaciones. Le preguntaron a que se dedicaba y prácticamente si ella, como siempre lo hemos visto, había provocado al sujeto», señaló Ornelas Tapia.
Cuando los alumnos trataron de llamar a la policía, las autoridades jurídicas de la escuela les argumentaron que debido a la autonomía de la institución, no podían ingresar policías para arrestar al atacante, identificado como David G.
«También dijeron que no podían detenerlo hasta que salir de su horario laboral», aseveró Ornelas al portal SinEmbargo.
El agresor quedó en libertad porque se calificó de «no legal la detención», debido a la errónea coordinación de las autoridades de la escuela y de las autoridades policiacas, indicó la defensora.
La víctima no ha recibido la atención adecuada, la única solución que le ofrecieron fue cambiarla de plantel, agregó la activista.
Por ello, alumnos se manifestaron el pasado miércoles, bloqueando la Avenida 100 metros.
«Queremos que no siga pasando esto, no es la primera vez, ha pasado en otros planteles y lo único que hacen las autoridades es ocultarlo, encubrirlo y revictimizarnos: nos dicen que nosotras lo provocamos, que por qué vamos vestidas así y… pues simplemente no puede seguir esto» destacó la alumna María del Carmen.
La defensora informó que, tras el ataque, alumnos organizaron asambleas donde señalaron que el empleado ya tenía una denuncia por tentativa de violación a una expareja.
El presuntó responsable de 21 años, al parecer tendría parentesco con uno de los propietarios de la concesionaria de las cafeterías Cibarium, en varios planteles. Por el momento, el sujeto permanece escondido, «no tenemos conocimiento de dónde se encuentra», afirmó Ornelas Tapia.
«Estamos hablando de una universidad de las más importantes del país. ¿Cómo pueden tener trabajadores así en el plantel?», cuestionó la activista.
Los estudiantes inconformes analizan si realizarán un paro hasta que el pliego petitorio, que entregaron a las autoridades, en el que piden más protección, sensibilización, entre otros aspectos, sea atendido, comentó la defensora.
Mientras tanto, la cafetería donde ocurrieron los hechos permanece clausurada desde la fecha en que la joven fue atacada y continuará así hasta que finalicen las investigaciones correspondientes.