Las protestas de maestros oaxaqueños ante las juntas distritales del Instituto Nacional Electoral (INE) provocaron la quema de 18 paquetes comiciales en la sede de Juchitán, en tanto que otros 23 paquetes le fueron sustraídos a un capacitador durante su traslado para la entrega a los funcionarios de casilla.
El instituto informó que como parte de un protocolo para evitar enfrentamientos en las sedes no había presencia militar, pero condenó ‘‘todo acto violento en contra de las instalaciones electorales’’.
Después de una reunión para analizar los hechos en la región del Istmo y el estallido de un artefacto explosivo en un módulo de atención ciudadana en Puebla, el presidente de las comisiones unidas de Organización y Capacitación Electoral, Arturo Sánchez, sostuvo: ‘‘El INE condena categóricamente la utilización de la violencia y llama a conducir las diversas manifestaciones de todos los grupos en la zona por la vía pacífica. Reprobamos cualquier intención de atentar en contra de las elecciones como método de presión en la búsqueda de intereses particulares que nada tienen que ver’’ con los sufragios.
A causa de las movilizaciones magisteriales previstas para este lunes –notificadas al instituto por la Secretaría de Gobernación–, el consejero Baños informó que se instruyó a las juntas local y distritales de Oaxaca cerrar las oficinas. ‘‘Es una medida evidentemente provisional. Estaremos en breve reanudando las actividades institucionales para terminar la preparación de la jornada’’.
En conferencia de prensa, los consejeros confirmaron que las afectaciones fueron en la sede de Juchitán, donde un grupo sustrajo de las bodegas 18 paquetes correspondientes a la elección federal del municipio de San Dionisio del Mar, la cual, por decisión de la junta, se había decidido no instalar y se destruirían al terminar la elección. En este caso, aunque invalidadas, ya se habrían destruido 5 mil boletas.
Por otro lado, ‘‘se sustrajeron materiales electorales, incluyendo las boletas correspondientes a 13 casillas del distrito 02, con cabecera en Teotitlán de Flores Magón, cuando el supervisor de la zona las trasladaba para su entrega. Al respecto, queremos enfatizar que ya está en curso el proceso de reimpresión de dichos documentos en Talleres Gráficos’’. Se estima que la afectación oscila entre 6 mil y 8 mil boletas.
Sobre la falta de resguardo militar, la consejera Pamela San Martín separó la situación, pues en Teotitlán de Flores Magón los hechos ocurrieron en el traslado. En el otro caso, ‘‘tenemos un protocolo definido con las distintas instancias de seguridad para evitar enfrentamientos y que se ponga en riesgo la vida e integridad de las y los ciudadanos’’, sean trabajadores del INE o funcionarios de casilla.
Los consejeros no pudieron precisar dónde se interceptó al capacitador electoral y cuál es el paradero actual del material robado. Baños dijo que será mediante las averiguaciones que se desprendan de la denuncia presentada ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales, dependiente de la Procuraduría General de la República, como se podrá determinar con precisión si fueron integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación quienes participaron en esos actos.
Por su parte, el representante del PRI ante el INE, Jorge Carlos Ramírez Marín, condenó los hechos que pueden afectar la elección en Oaxaca y demandó que el gobierno de la entidad asuma sus responsabilidades para garantizar la realización de los comicios. Señaló que la Secretaría de Gobernación también debe participar para ofrecer seguridad a los electores.
La Jornada