¿La reforma política de 2014 puso en riesgo al Instituto Nacional Electoral (INE) debido a la sobrecarga de atribuciones que le fueron conferidas, según el Informe de la Misión de Acompañamiento de la Unión Interamericana de Organismos Electorales (UNIORE) sobre los comicios del pasado 7 de junio.
Sin embargo, el organismo concluye que a pesar de los episodios de violencia y los desafíos para implementar la reforma política, el INE superó la prueba y logró organizar los comicios con un incremento en la participación en las urnas.
Aunque los mecanismos implementados en el proceso electoral generaron mayor equidad para los contendientes y partidos, la UNIORE apunta que la percepción ciudadana mantiene un escenario de desconfianza hacia el árbitro electoral y duda sobre los resultados del pasado 7 de junio.
El análisis indica que se crearon esquemas innovadores y destaca el sistema electrónico de fiscalización, la paridad de género y las candidaturas independientes. Mientras que sobre el aspecto de la operación electoral reconocen las bondades de la casilla única y los procesos de capacitación de funcionarios.
A manera de conclusión, el organismo electoral internacional recomienda mejorar la infraestructura de las casillas, porque son incómodas para los funcionarios y representantes de partido, así como poco llamativas para los electores.
A su vez, pide que para el próximo proceso electoral exista un acuerdo político que permita blindar a las elecciones de actos de violencia como los ocurridos el 7 de junio en Oaxaca, Chiapas y Guerrero, que pusieron en riesgo el proceso electoral.
“El nuevo papel del INE como institución nacional y no únicamente federal, ha llevado a la nacionalización de los problemas locales. De tal suerte que en el Consejo General ‘explotan’ problemas locales que podrían afectar la gobernabilidad electoral mexicana”, detalla el informe.
Sobre la extensión de atribuciones para castigar a los partidos, critican que la “sustanciación y sanciones por parte del propio INE le lleva a un enfrentamiento y desgaste directo con los partidos políticos, los cuales tienen representación en el órgano colegiado (…) la posibilidad de reclamos y bloqueos en el seno del INE se facilita entonces, al tiempo que propicia también un desgaste del órgano”.
Otra de las críticas es el alto costo que representa para la ciudadanía el financiamiento a los partidos. De acuerdo son su análisis, los recursos entregados tanto en los estados como a nivel federal a los partidos son del orden de 667 millones de dólares en 2015, es decir, más de 10 mil millones de pesos para que puedan sostenerse y hacer campaña, “claramente el financiamiento se encuentra entre los más generosos del mundo”.
Fuente: 24 Horas