Reino Unido evalúa eliminar popotes y cotonetes (q-tips) en los próximos años como una medida para disminuir el residuo plástico que llega a los océanos.
Los cotonetes muchas veces se echan al escusado y junto con las tapas de las botellas de plástico es una de las causas más graves de contaminación de los mares.
Organizaciones ambientalistas y científicos han documentado que las aves y la fauna marina ingieren pequeñas cantidades de residuos plásticos que entran a la cadena alimenticia o les causa la muerte.
El gobierno publicó este jueves que 150 millones de toneladas de plástico contaminan los océanos y cada año un millón de pájaros y cien mil mamíferos marinos mueren por consumir el plástico o se quedan enredados en los desperdicios.
El Departamento de Medio Ambiente, Alimentos y Asuntos Rurales, (Defra por su sigla en inglés) hará una consulta pública este año para eliminar el uso de los popotes y cotonetes que son una de las fuentes de contaminación marina.
El secretario de Defra, Michael Gove, calificó como un “flagelo” el uso indiscriminado de plásticos.
Es solo a través del gobierno, los negocios y el público trabajando juntos que podremos proteger nuestro ambiente para la próxima generación”, señaló el político conservador.
En tanto, la primera ministra de Reino Unido, Theresa May, aprovechará la cumbre del Commonwealth que se realiza en esta ciudad para exhortar a los 53 países de la Mancomunidad de Naciones a combatir el uso del plástico.
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Como parte del Plan de Medio Ambiente en los próximos 25 años el gobierno prohibió en enero de este año el uso de microplásticos que entran a los océanos en forma de diminutas partículas.
Estos microplásticos son utilizados en la fabricación de pasta de dientes, exfoliantes, cosméticos y otros productos de belleza.
Se estima que hasta cien mil de estas pequeñas partículas pueden irse al drenaje en tan solo un baño de regadera.
Otras medidas del gobierno para reducir el uso del plástico en los próximos 25 años son los anaqueles libres de empaques en los supermercados y la disminución en el uso de botellas de plásticos.
Reino Unido consume 13 mil millones de botellas de plástico cada año, de las cuales la mitad termina en los vertederos sanitarios, son incinerados o terminan en los océanos.
La Sociedad de Conservación Marina reportó que en 2017 en su limpieza anual de playas registró un incremento de 10 por ciento en la contaminación de plástico en el último año.
El 20 por ciento del desperdicio provenían de botellas de plástico y envolturas de comida.
Otra de las medidas que el gobierno analiza es cobrar 25 centavos de libra (36 centavos de dólar) por cada vaso desechable en las cafeterías.
Se estima que cada año cinco mil millones de envases de plástico procedentes de las cadenas de café terminan en la basura.
El Comité de Auditoría de Medio Ambiente recomendó a las cadenas de cafeterías incentivar el uso de tazas reciclables en los próximos cinco años para combatir el desecho plástico.
Por otra parte, en 2015, Inglaterra introdujo un impuesto de cinco centavos de libra a las bolsas de plástico en supermercados, en un intento por disminuir su uso indiscriminado.
De acuerdo con estadísticas de Defra, el uso de bolsas de plástico ha disminuido en 80 por ciento desde que fue introducida la medida.
En 2014 los supermercados en Inglaterra repartieron siete mil 500 millones de bolsas de plástico, unas 61 mil toneladas en total, señalan cifras oficiales, equivalentes a 140 bolsas por persona en promedio.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.