Conecta con nosotros

Resto del mundo

Roban valioso ejemplar de Cien años de soledad

El robo de un ejemplar de la primera edición de Cien años de soledad, la obra maestra de Gabriel García Márquez, en la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo), generó indignación en Colombia.

El libro de Cien años de soledad, publicado en 1967 por el sello editorial Suramérica, estaba en una vitrina de vidrio de la librería en el pabellón de Macondo, a cargo de la Asociación Colombiana de Libreros Independientes.

Los organizadores de la FILBo aún no se explican cómo el ladrón logró sacar este sábado el ejemplar firmado por García Márquez, y es considerado como una reliquia editorial.

“Teníamos dos celadores y 20 funcionarios, así como torres de control. Las vitrinas estaban bajo llave y sus chapas eran las que se utilizan en las vitrinas, que fueron puestas por los encargados del montaje», dijo el librero independiente David Roa.

La persona que se llevó el libro logró abrir “la vitrina y se llevaron el libro y la chapa. Tenemos versiones de personas que habían visto el ejemplar y cinco minutos después, ya no estaba», apuntó Roa.

El libro Cien años de soledad era propiedad del librero Álvaro Castillo, quien pidió al ladrón que se llevó el ejemplar que lo regrese, y recordó la frase que escribió Gabo: “Para Álvaro Castillo, el librovejero, como ayer y como siempre. Su amigo, Gabriel».

El robo de la pieza literaria tiene indignados a los libreros colombianos, a las autoridades de cultura y hasta a los propios visitantes de la FILBo, que este año fue dedicada a la vida y obra del Premio Nobel de Literatura (1982).

El libro hace parte de los ocho mil ejemplares que fueron publicados por el sello editorial Suramericana, y podría costar en el mercado internacional más de 12 mil dólares, según estimaciones de los editores.

Fuente: Azteca Noticias

Resto del mundo

Cofece multa a Walmart por prácticas monopólicas: la batalla legal apenas comienza

La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) asestó un golpe histórico al multar a Walmart de México con 93.4 millones de pesos tras concluir una investigación que se extendió por más de cuatro años. La razón: prácticas monopólicas relativas, particularmente en el trato con sus distribuidores.

Según el dictamen de la Cofece, Walmart aprovechó su posición dominante en el mercado para imponer condiciones desfavorables a los proveedores, afectando la competencia en el sector. Aunque no se han revelado todos los detalles de las “contribuciones” impuestas a los distribuidores, el veredicto destaca cómo estas prácticas distorsionan el acceso al mercado y perjudican a competidores más pequeños.

En respuesta, Walmart no tardó en reaccionar. La empresa anunció que impugnará la decisión y enfatizó su compromiso con el cumplimiento de las leyes mexicanas. En su comunicación oficial, destacó que la sanción carece de fundamento y que está basada en interpretaciones erróneas. Este movimiento era predecible: para una empresa de este tamaño, 93 millones de pesos no solo representan una cifra considerable, sino también una amenaza a su reputación.

Por otro lado, la Cofece también se juega mucho. Este caso es una muestra clara de su intención de reforzar la vigilancia sobre los gigantes corporativos. Sin embargo, una batalla legal prolongada podría poner a prueba su capacidad de defender sus resoluciones en tribunales.

Más allá de la multa, el caso de Walmart pone el reflector sobre una problemática común en el comercio minorista: el desbalance de poder entre grandes cadenas y pequeños distribuidores. Si bien el desenlace de este litigio aún está por definirse, el mensaje es claro: los días de actuar sin consecuencias podrían estar contados. La industria y los consumidores estarán atentos a cada movimiento en esta batalla judicial.

 

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto