Con un buen tarro o directamente de la botella, este viernes 4 de agosto se celebra el Día Mundial de la Cerveza, una de las bebidas mayormente consumidas en el mundo y de las preferidas de la gente.
Clara, oscura, cremosa, de barril o sin alcohol; hay para todos los gustos y como cada primer viernes de agosto, el mundo celebra la existencia de la cerveza, bebida alcohólica fermentada y que puede ser elaborada con cebada, arroz, maíz, lúpulo, agua y levadura.
El proceso de elaboración de la cerveza comienza con agua pura, granos de maíz y una mezcla de cebada, que es el ingrediente básico al que por lo regular se le conoce como “el alma de la cerveza”; es esta mezcla la que contribuye al color y a las características del sabor de la bebida.
En México, la industria cervecera es una de las más importantes, pues contribuye de manera importante al desarrollo económico y social del país, así como a la promoción de la cultura y el turismo nacionales.
La actividad cervecera nacional impacta a toda una cadena de valor, desde agricultores, transportistas e industriales, hasta puntos de venta, restaurantes y centros de recreación y esparcimiento.
Pese a que contiene alcohol, a la cerveza se le atribuyen diversas ventajas, pues además de ser refrescante es natural, con nulo contenido de grasa y colesterol.
El Día Internacional de la Cerveza se celebró por primera vez en 2007 en Santa Cruz, California, y actualmente se festeja en más de 207 ciudades del mundo.
De acuerdo con el sitio blobdelacerveza.com, la Republica Checa es el país que más cerveza consume, con 142.6 litros por persona, seguida de Austria y Alemania con 104.8 y 104.7 litros por habitante.
Según datos del gobierno mexicano, de una lista de 125 países, hace un par de años México ocupaba el séptimo como productor, el primero como exportador y el décimo quinto como importador de cerveza.
En América Latina, México era el tercer país en consumo de esta bebida y unos 60 litros per cápita por año.
Datos de Cerveceros de México refieren que esta industria genera 55 mil empleos directos y 2.5 millones de indirectos, aunado a que apoya a uno de los sectores más importantes de la economía: el sector primario (la agricultura) en la producción de cebada, de arroz y de maíz.
Aunque el día y el motivo es lo de menos, este viernes hay pretexto para celebrar, ya sea en una comida o cena, con tacos o cualquier comida típica, solos o en buena compañía, pero con una cerveza bien fría.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.