Ya se habían tardado… El PRI de Chihuahua tiró su primer torpedazo legal contra José Luis ‘Chacho’ Barraza, a quien acusan de haber presentado firmas apócrifas ante la autoridad electoral, con lo cual buscan poner en entredicho el respaldo ciudadano que el candidato independiente dice cargar, razón por la cual el también empresario quiso irse alto con eso de las firmas y presentó 156 mil 107, cerca del doble de las que necesitaba.

En rueda de prensa, la diputada Gloria Porras, el líder priísta Carlos Morales, el dirigente estatal del tricolor Guillermo Dowell, entre otros, acusaron a Barraza de haber falsificado las rúbricas, pues hay de varios partidos ahí inscritos.

Sin embargo, la trampa que pretendieron tenderle es de lo más burda. Para empezar, la noticia se reprodujo en varios medios aliados del PRI-Gobierno igualita, escrita desde los cuarteles del tricolor, y  en segunda, nadie tuvo oportunidad de checar esos paquetes y las miles de firmas, pues fueron entregadas, selladas y resguardadas, y momentos después los priístas ya sabían que su nombre iba ahí ¿cómo supieron?

Lo evidente es que algunos de ellos fueron muy despistadamente y firmaron (falsamente) para luego echarle este torito encima al que, según como pinta, es el gallo más fuerte para la gubernatura. Ya se la saben, las mañas de la casa.

Donde también están preparando los arietes y barricadas legales es en el PRI y el PAN, pues Javier Corral será malo para ganar elecciones con votos, pero es rebueno para impugnarlas e imponerse por la vía legal, como ha hecho más de una vez en el PAN, donde de tercer lugar ha pasado a la victoria gracias a los reveses judiciales que aprovechan las transas del contrincante para hundirlo.

Enrique Serrano y su equipo saben esto, y saben que Javier Corral se relame los bigotes por presentar recursos judiciales sustentados, así que tendrán que redoblar esfuerzos para no violar la Ley Electoral tan a la brava.

El grupo político que, de manera profesional y sin hacer mucho ruido, está ganando posiciones en el estado, es el encabezado desde Delicias, pues ha corrido el rumor de que Mario Trevizo, secretario general del Gobierno actual pero con raíces baecistas, podría ser el próximo rector de la Universidad Autónoma de Chihuahua.

Trevizo tiene buenos oficios políticos, pero su principal fuerte es su eficacia. Durante su paso por la política se ha forjado como un funcionario que prioriza los resultados, sin que la grilla le sea ajena, por supuesto. Así, otros aspirantes como Alfredo de la Torre fueron dejados en el camino, con premios de consolación como la sindicatura, aunque Alfredo no recula y no se va a sacar la espinita de ser rector hasta que lo logre.

Así, suman otra posición de peso (y nóminas para su tribu), pues Lucía Chavira va ganando peso poco a poco, gracias a los buenos oficios que tiene, mientras que su esposo, Marco Adán, ha tenido la visión y madurez personal y política como para hacerse a un lado y dedicarse a respaldar a la candidata en su camino, sin atravesársele. De ganar ambas posiciones y con el impulso ascendente que llevan, podrían tener un pie en la gubernatura para arrancar proyecto en 2021, ya sea con Lucía o con Marco, ambos buenos perfiles y juntos en una dupla políticamente muy fuerte.

Pasando a la grilla no electoral, estuvo gacho el desaire que le hicieron al magistrado Filiberto Terrazas en la toma de protesta de Jorge Echavarría como presidente de la Barra de Abogados. Ni para saludar le prestaron el micrófono, y nos cuentan que todo se debe al lastre por violencia familiar que arrastra, el cual el Supremo Tribunal de Justicia ha dejado correr haciéndose de la vista gorda, pero la sociedad no, y menos las defensoras de los derechos de las mujeres que no se la perdonan ni se la perdonarán.

‘El Fili’, quien además ser acusado de violencia por su esposa, fue exhibido como probable ‘padrino’ de una guapísima jovencita que aspiraba a ser secretaria proyectista y casi magistrada, a pesar de no tener ninguna experiencia… al menos no judicial. Al final se le cayó de las manos.

Pero no fue el único escobazo que recibió el magistrado. Emma Saldaña, titular del Instituto Chihuahuense de la Mujer, también se le fue recio y encaró al mismísimo presidente del Supremo Tribunal por este caso.

Emma también barrió con el secretario de Desarrollo Social, José Luis García, a quien se le echaron encima por la violencia institucional que dicen recibir de su persona y su dependencia, pues mencionan desde desprecios hasta mentadas y empujones. El funcionario se dijo sorprendido y preocupado… a ver si resuelve.