Durante su primer informe de gobierno en el Zócalo capitalino, la presidenta Claudia Sheinbaum defendió con firmeza la reforma a la Ley de Amparo recientemente aprobada en el Senado, la cual —aseguró— no limita el derecho de los ciudadanos a protegerse frente a actos de autoridad, sino que busca agilizar la impartición de justicia y cerrar el paso a quienes utilizan los recursos legales como escudo para eludir responsabilidades fiscales.
“Su objetivo es hacer la justicia más rápida, más expedita, garantizar la pronta actuación frente al lavado de dinero y evitar que el amparo se convierta en un resguardo de por vida de los potentados de antes que no quieren pagar sus impuestos”, declaró ante miles de simpatizantes reunidos en la plancha del Zócalo.
La mandataria hizo alusión indirecta a los grandes empresarios que mantienen litigios con el gobierno por adeudos fiscales, entre ellos Ricardo Salinas Pliego, a quien ha exigido el pago de sus contribuciones. Días atrás, Sheinbaum incluso sugirió que el empresario podría recibir un descuento si liquidaba su deuda.
El tema surge en medio de cuestionamientos hacia figuras cercanas a su administración. La oposición ha señalado que Adán Augusto López Hernández, exsecretario de Gobernación y actual senador de Morena, habría pagado solo 2.4% de Impuesto Sobre la Renta por ingresos superiores a 79 millones de pesos entre 2023 y 2024.
Durante su discurso, Sheinbaum también celebró otras reformas impulsadas por su gobierno, entre ellas la integración de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, el reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas, el regreso de los trenes de pasajeros y la eliminación de la reelección en cargos públicos a partir de 2030.
La presidenta aprovechó el acto para reiterar su compromiso con el proyecto de la Cuarta Transformación y con los ideales heredados del expresidente Andrés Manuel López Obrador. Criticó nuevamente a los gobiernos que gobernaron entre 1982 y 2018, a los que acusó de haber antepuesto los intereses económicos sobre las necesidades del pueblo.
El evento, al que asistieron gobernadores, funcionarios del gabinete y legisladores morenistas, marcó el cierre de la gira nacional de la mandataria para conmemorar su primer año al frente del país y reafirmar su postura frente a los sectores empresariales y políticos que, según dijo, “aún se resisten a perder sus privilegios”.