La presidenta Claudia Sheinbaum presentó este lunes 1 de septiembre su primer informe de gobierno desde Palacio Nacional, donde se dieron cita gobernadores, funcionarios y empresarios. En su mensaje, la mandataria aseguró que a lo largo de estos 11 meses en el poder ha buscado responder a las demandas ciudadanas con resultados tangibles, y dejó claro que su llegada a la presidencia representó también un triunfo para las mujeres del país.
Desde los primeros minutos, Sheinbaum evocó a Andrés Manuel López Obrador, a quien atribuyó avances en la reducción de la pobreza durante su administración. Al mismo tiempo, prometió mantener vivas las convicciones que la llevaron a la política: “Jamás olvidaré las causas que nos han movido siempre: construir un México más justo, democrático, libre y soberano”.
La presidenta aprovechó para responder a las críticas sobre su gestión y rechazó cualquier señalamiento de censura. “En México no se reprime, no se usa la fuerza del Estado en contra del pueblo. Se practica la mayor libertad de expresión de toda la historia. No existe la censura”, afirmó, defendiendo que en su gobierno prevalece el respeto pleno a la libertad de opinión.
Entre los logros que destacó, Sheinbaum subrayó la reforma judicial, que calificó como un cambio de fondo en la vida institucional del país. “Bienvenido, nuevo Poder Judicial. Se termina la era del nepotismo, corrupción y privilegios, y comienza una nueva era de legalidad, un verdadero Estado de derecho”, declaró.
En su discurso, también enfatizó que bajo su administración se han garantizado elecciones libres, lo que, dijo, marca una diferencia respecto a etapas anteriores.
Con este primer informe, Sheinbaum buscó consolidar la narrativa de un gobierno que, a menos de un año de haber iniciado, apuesta por la continuidad de los principios de la llamada Cuarta Transformación y al mismo tiempo se coloca como un proyecto propio que, según la mandataria, pone en el centro a la justicia social, la igualdad de género y la defensa de las libertades.