En el segundo capítulo de “The Last Dance”, Scottie Pippen habló sobre una lesión que no quiso operarse durante el verano de 1997, para no arruinarlo, y prefirió hacerla durante el inicio de la campaña, esto como parte de su malestar al ser el sexto mejor pagado del plantel en aquel entonces, cuando todos sabían que debía ser el segundo, solo por debajo de Jordan.
Ante ello, Michael Jordan emitió su postura al respecto: “Scottie estaba equivocado sobre ese escenario. Podría haberse hecho la cirugía tan pronto como terminara la temporada y estar listo para la siguiente. Scottie estaba tratando de poner en jaque a la directiva para que cambiaran su contrato, algo que nunca iban a hacer”.
Por tal motivo, Kerr fue consultado por ‘The Jump’ de ESPN, donde dijo todo lo contrario a la opinión de Jordan: “No, en absoluto. Todos respetaban mucho a Scottie. Sentimos su frustración. Probablemente debería haber sido el segundo hombre mejor pagado de la NBA, o definitivamente entre los cinco primeros. Así que todos lo sentimos por él, nadie lo resentía por tener esa cirugía. Más tarde, todos entendimos, le dimos su espacio y él estuvo allí para el segundo tramo de la temporada”.
Pippen fue clave en el éxito de los Bulls para ganar la mayoría de sus títulos, incluso el mismo Jordan lo comenta en el documental que se transmite por Netflix.