Tirote es el que traen en la representación local de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), ese organismo filopriísta del que han salido gobernadores como Patricio Martínez, quien ahora se está jugando la honra intentando demostrar quién trae las canicas, pero la mano de Palacio también quiere hacerse notar.
Así, el desplegado que lanzaron ‘Ticho’ y otros ex presidentes de la Canaco rasgándose las vestiduras por ver pisoteados “124 años de grandeza” no sirvió y llueva o truene hoy habrá elecciones en el organismo, pues los dos aspirantes se negaron a renunciar y serán los agremiados (no sólo las cúpulas) las que participen, algo poco usual en este grupo en el que privan el dedazo, el autoritarismo y los arreglos en lo oscurito.
Las apuestas están cargadas del lado de Carlos Fierro, el mero mero de Mueblerías Portillo, quien tiene añeja militancia y muchas cartas para jugar, aunque tampoco se puede dar por muerto a Javier Ruiz Mares, aunque es poco relevante quién quede, sino quién está detrás, pues se trata de grupos políticos confrontados en disputas internas, las cuales ya llegaron a escándalo nacional y hasta el escritorio del secretario de Economía, Ildefonso Guajardo.
Así, las cámaras empresariales se contagian de la degradación política que sufre en general el estado, en el que lo último que importa son aspectos como la democracia, la transparencia o el juego limpio. Todo quieren resolver con mañas y la cloaca explota con el pleito entre comadres, pues más que nada hay una lucha de poder y egos en un organismo que siempre había mantenido más o menos cierta unidad, al menos cosmética.
Pero la grilla no se limita a la Canaco. En la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), filopanista, la cosa está que arde con las críticas a Álvaro Madero, las cuales tienen más tintes políticos que empresariales, pues volvemos a lo mismo, los rancios usos y costumbres de los políticos permean a este sector y ahora al ex medio alcalde no lo bajan de una chirinola tras otra, aunque eso sí, a la hora de entrarle a trabajar todos están muy ocupados, se queja. La Canacintra parece tranquila, pero checaremos qué tan cierto es eso.
Otro empresario que anda en la grilla es José Luis “Chacho” Barraza, presidente del Consejo de Aeroméxico, quien suele concentrar sus neuronas en asuntos empresariales, pero cada vez que se acercan elecciones se baja de su avión y pone pies en los fangosos terrenos de la política, como hizo durante el encuentro empresarial, donde anunció la creación de la fundación Chihuahua Primero (C1), la cual dijo es un esfuerzo para combatir la corrupción, la impunidad y la falta de transparencia en el manejo de los recursos públicos, o sea, casi casi viene a limpiar el gallinero.
Pero a pesar de que esas acciones no tienen (o no las dijo) un objetivo específico y una ruta clara, parece que el objetivo es más que nada hacer ruido y repetir esa polvareda política que levantó cuando asumió la presidencia de la Coparmex, y podría buscar ser una especie de ‘pegaso’, es decir, un bronco con alas, pues ya soltó los rumores de que podría irse por la independiente, con o sin su aliado histórico albiazul.
Y es que los empresarios cada vez necesitan menos de los partidos, sobre todo del PAN, pues entre la (creciente) burocracia partidista y la ineptitud que presenta en especial este partido para construir plataformas políticas, movilizar fuerzas vivas y a fin de cuentas ganar elecciones, los empresarios prefieren ir limpiecitos, sin la mancha de siglas rancias, y meterle toda su lana a sus propios proyectos.
En el PAN, mientras, se habla de que la supuesta indecisión de Gustavo Madero está causando que la lucha por la candidatura panista se centre entre Juan Blanco y Javier Corral, ambos con notables ventajas y altas posibilidades de volver azul la gubernatura, no tanto por méritos propios, sino por el hartazgo que tiene la ciudadanía por los gobiernos tricolores a nivel nacional y especialmente estatal.
Juan Blanco es un lobo que sabe meterse en la guarida de los priístas y robarles las presas en sus narices. Eso se los ha demostrado varias veces y sin un pleito judicial no saben cómo pararlo, pues en las urnas es peligroso. Javier Corral jamás gana ninguna elección, pero el bombardeo constante a los excesos del gobernador César Duarte y su cabildeo en altas ligas de la vida nacional podrían robustecerlo, pues también va arriba en las encuestas, a pesar de que en su partido casi nadie lo puede ver.
Pasando a la pugna interna pero en un escalón más abajo, el de la alcaldía de Chihuahua, encontramos a Maru Campos haciendo gestiones en barandilla, una labor que está teniendo un impacto muy positivo pues un detalle que hasta sus adversarios le reconocen es ser incansablemente chambeadora, movida y tendida, por lo que atiende a ciudadanos por montones y espera ganarse su candidatura a la antigüita, con el de boca en boca, sin despreciar herramientas como las redes sociales, donde se mueve bien, a pesar de las críticas que le han acarreado su estrecha cercanía con Marcela Palos, azote de ‘pecadores’ como lesbianas, gays, madres solteras y sobre todo mujeres que abortan.
Pero Rocío Reza no canta mal las rancheras ni se queda atrás, quien le apuesta a los acuerdos con las cúpulas y con los panistas clave, aunque la dirigencia de Mario Vázquez insista en bajarla de la contienda en aras de la ‘unidad’, una opción que suena casi descartada pues Rocío sabe qué cartas tiene y parece estar dispuesta a jugarlas, pues se equivoca quien la de por perdida. El tablero está más o menos parejo.
Pero en el mismo caso que la gubernatura, un ‘independiente’ salpicado de azul podría ser un pie en el zapato para estas damas, pues Antonio López presume traer apoyo de empresarios, y más que el carisma son los billetes y los acuerdos los que conquistan votos. Así, igual que ‘Chacho’, Toño podría prescindir de la estructura partidista que en muchos casos entorpece proyectos y los paraliza antes que hacerlos funcionar.
Por lo pronto, en redes sociales ya salió de su tono de gurú de la superación personal y lanza puyazitos a diestra y siniestra, queriéndose poner un disfraz de ciudadano indignado (que le queda tan bien como su peinadito de lado) y de ser uno más en la yunta panista ahora se dice renovado, arrepentido y listo para gobernar por y para los ciudadanos… lo peor es que puede haber quién le crea o quien finja creerle.
El que también regresó vía redes sociales en una versión ciberpolítica de ‘Walking dead’ fue Óscar Villalobos, baecista de sangre (literal), quien presumió en su muro la visita que realizó al Comité Ejecutivo Nacional, para mostrar que ya se curó la descalabrada que le dieron cuando lo sacaron del Congreso ya que su plurinominal murió de éxito, y dicen que está a nada de levantar la mano como aspirante, aliado con quien sea, él no tiene filias ni fobias… o las disimula para su conveniencia.
Ya que seguimos con las redes sociales, el que anda muy atento es Marcelo González Tachiquín, quien de nuevo repitió la campañesta fórmula de poner su celular, face y whattsapp a disposición de la ciudadanía, para echar el chal o atender sus reclamos, en una fórmula que ya le funcionó al ‘Bronco’ y que maquilla a los políticos de cercanos y sensibles. Benditas redes sociales… benditas.
Y ya que hablamos de lanzados, no podemos dejar de mencionar por tercer día consecutivo la alegría e ilusión que recorre las venas y arterias del alcalde Javier Garfio, quien tiene la mesa servida para su debut ante 500 alcaldes y 3 mil regidores confirmados en su quinceañera… es decir, la Conferencia Nacional de Municipios de México, en el que bailará con políticos pesados para seducirlos y hacerles ver que para la gubernatura no hay mejor que él.
Como toda quinceañera, quiere que su evento sea especial, mágico, maravilloso, y no podría serlo con gente aficionada a robar cámara como el ‘Teto’ Murguía, a quien mandaron a Guerrero como representante del gobernador Duarte durante la toma del nuevo mandatario de aquella entidad, el priísta Rogelio Ortega. Por si fuera poco, ninguno de sus rivales internos compartirá presídium con él, es su gran día, y él lo sabe.