Conecta con nosotros

Resto del mundo

Trasladarán a expresidente Lula a cárcel de Sao Paulo

La Justicia brasileña ordenó hoy la transferencia del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva desde Curitiba, donde cumple una pena de prisión por corrupción y lavado de dinero, a un centro penitenciario de Sao Paulo aún por determinar.

Lula da Silva (2003-2010) se encuentra detenido desde el 7 de abril de 2018 en la sede de la Policía Federal de Curitiba, donde purga una condena de 8 años y 10 meses de cárcel por su implicación en la trama de corrupción de la Lava Jato.

Las autoridades no precisaron cuándo ni a qué prisión el exmandatario podría ser transferido.

En el auto, la magistrada Carolina Lebbos subrayó «la plena pertinencia de la transferencia» para Sao Paulo y recordó que «no hay razones» para mantener el cumplimiento de la pena «en un lugar distante del núcleo familiar y social».

La transferencia fue solicitada por la Superintendencia Regional de la Policía Federal del estado de Paraná, cuya capital es Curitiba, tras alegar que, debido al encarcelamiento de Lula da Silva, los cuerpos de seguridad deben de actuar de forma «permanente» para evitar enfrentamientos entre «grupos antagónicos».

La defensa del expresidente, sin embargo, solicitó que cualquier decisión judicial aguarde el pronunciamiento del Tribunal Supremo sobre un hábeas corpus solicitado por los abogados, según dijeron fuentes del Instituto Lula.

El exmandatario fue condenado a 9 meses y 6 meses de prisión por el juez Sergio Moro, actual ministro de Justicia del presidente Jair Bolsonaro, después de dar por comprobado que Lula da Silva recibió un apartamento en el balneario paulista de Guarujá a cambio de favores políticos a la constructora OAS.

La pena fue ampliada en segunda instancia a 12 años y 1 mes y rebajada posteriormente en tercera instancia a 8 años y 10 meses.

Sobre Lula da Silva ya pesa otra condena a otros 12 años de cárcel en un caso muy similar, pero dictada hasta ahora en primera instancia y aún no confirmada en la segunda.

Desde que fue encarcelado, Lula da Silva permanece en una celda especial, de 15 metros cuadrados y adaptada a su condición de expresidente, en el edificio de la Policía Federal en Curitiba, ciudad del sur del país en la que tiene sede el tribunal a cargo de la operación anticorrupción conocida como Lava Jato.

El antiguo líder sindical, acorralado por diversas causas judiciales, se dice víctima de una persecución judicial que tiene como objetivo apartarle del escenario político, y que lo dejó fuera de las elecciones presidenciales de octubre pasado, las cuales ganó Jair Bolsonaro.

Excelsior

Nota Principal

Trump responde desde Escocia: niega vínculo con Epstein y desmiente carta comprometedora

Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos, volvió a pronunciarse públicamente sobre su relación con Jeffrey Epstein, en medio de una creciente presión mediática y política que ha resurgido incluso durante su visita oficial al Reino Unido. Desde Escocia, el mandatario ofreció una de sus declaraciones más extensas hasta la fecha sobre el tema, asegurando que cortó toda relación con el financiero tras una disputa personal y negó categóricamente cualquier conducta inapropiada.

Durante una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por el primer ministro británico Keir Starmer, Trump rechazó haber visitado la isla privada de Epstein y desmintió su supuesta autoría de una carta de cumpleaños con dibujos explícitos que recientemente fue atribuida a él por un reportaje del Wall Street Journal. El presidente estadounidense afirmó que dicha carta es falsa y anunció acciones legales contra el medio.

«Yo no hago dibujos. A veces hago esquemas de edificios para obras de caridad, pero nunca he hecho dibujos de mujeres. Esa carta no es mía», declaró Trump. También subrayó que nunca aceptó una invitación para ir a la isla de Epstein en el Caribe, a la que calificó como “un lugar al que nunca quise ir”.

El mandatario aseguró que rompió relación con Epstein mucho antes de que se presentaran cargos en su contra. «Me robó personal de confianza. Le dije que no lo volviera a hacer y lo expulsé. Fue persona non grata desde entonces», detalló.

La Casa Blanca ha calificado como “falsas” las versiones que sugieren una relación comprometedora entre Trump y Epstein. El director de comunicaciones, Steven Cheung, indicó que las acusaciones forman parte de una campaña mediática que busca vincular al presidente con actividades delictivas sin pruebas.

A pesar de los esfuerzos del gobierno por dejar atrás el tema, el caso Epstein continúa generando atención dentro y fuera de Estados Unidos. El propio Trump reconoció su frustración por la cobertura persistente del asunto, señalando que se trata de un intento por desviar la atención de temas más relevantes, como sus acuerdos comerciales con Europa.

En paralelo, el vicepresidente JD Vance también abordó el tema en un evento en Ohio, donde acusó a administraciones pasadas —como las de Barack Obama y George W. Bush— de haber sido permisivas con Epstein. Vance defendió la postura de su gobierno y pidió enfocarse en quienes, según él, encubrieron los crímenes del financiero por décadas.

Aunque el nombre de Trump ha aparecido en documentos relacionados con Epstein, el presidente no enfrenta actualmente ninguna acusación formal. Sin embargo, el tema continúa siendo un punto sensible dentro de su administración, especialmente ante el creciente escrutinio público y político.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto