Donald Trump, presidente de Estados Unidos, pidió a sus simpatizantes y miembros del Partido Republicano “revertir” o rechazar en conjunto el resultado de la elección presidencial del martes 3 de noviembre, luego de alegar, sin pruebas y tras reveses en tribunales, que los comicios fueron “amañados” para asegurarle la victoria a Joe Biden, exvicepresidente y candidato del Partido Demócrata.
En una escena curiosa, el mandatario Donald Trump habló por el altavoz del teléfono, sostenido por su abogado Rudy Giuliani, a senadores republicanos de la legislatura estatal de Pensilvania: “Debemos revertir la elección” porque los demócratas “hicieron trampa, fue una elección fraudulenta”, apuntó, repitiendo varias teorías de conspiración que han sido rechazadas en tribunales de todo el país.
Ningún fraude masivo quedó demostrado durante la elección presidencial, y Joe Biden se encamina a ser el 46 presidente de Estados Unidos el 14 de diciembre, cuando se reúna el Colegio Electoral que constitucionalmente determina el ganador de la Casa Blanca de Washington D.C. La victoria de Biden se anunció el 7 de noviembre. Desde entonces, Donald Trump lanza acciones legales para intentar probar un fraude en su contra.
Sin aceptar su derrota, Donald Trump dio, sin embargo, luz verde el lunes por la noche al inicio del proceso de transferencia de poder de Joe Biden, cuya investidura está programada para el 20 de enero. La intervención de Donald Trump para rechazar la elección fue durante una audiencia celebrada en una sala de conferencias de un hotel en Gettysburg, por senadores de Pensilvania.
En su comunicación telefónica, Donald Trump dijo a los republicanos de Pensilvania:
“Ésta fue una elección que ganamos fácilmente. La ganamos por mucho. Pero esta elección fue amañada. Éste es un momento muy importante en la historia de nuestro país. Y ustedes brindan un servicio muy importante a nuestro país”.