La Policía irlandesa investiga la muerte de un pasajero ocurrida en un vuelo entre Lisboa y Dublín que provocó, además, un herido a bordo y la detención de una mujer portuguesa por supuesto trafico de estupefacientes.
El suceso tuvo lugar ayer domingo en un avión de la aerolínea irlandesa Aer Lingus que cubría el trayecto entre la capital lusa y la irlandesa, cuando un joven de 24 años de nacionalidad brasileña comenzó a sufrir convulsiones y a comportarse con agresividad.
El hombre fue llevado a la parte trasera del aparato por varias personas que trataron de calmarle e inmovilizarle, a lo que este respondió mordiendo a otro pasajero que continua hoy hospitalizado a consecuencia de las heridas sufridas.
Los expertos forenses examinan hoy el cuerpo del joven para determinar la causa de su muerte.
El piloto del avión de Aer Lingus decidió entonces efectuar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Cork, al sur de Irlanda, al tiempo que un doctor y dos enfermeras que viajaban a bordo del vuelo trataron de salvar, sin éxito, la vida al paciente.
Tras aterrizar hacia las 17.00 horas GMT de ayer domingo, los otros 167 pasajeros debieron permanecer durante aproximadamente dos horas en el avión para ser interrogados por la Garda.
La mayoría de los pasajeros continuaron después su viaje, excepto el herido por el mordisco y una mujer portuguesa de unos 40 años que continúa detenida por un presunto delito de tráfico de drogas.
La Garda no ha confirmado aún si el fallecido y esta mujer viajaban juntos, pero los medios locales han informado de que su detención se produzco tras el hallazgo de anfetaminas en una maleta facturada.