El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC), Omar García Harfuch, confirmó que en México hay una investigación abierta contra el narcotraficante canadiense James Ryan Wedding.
En conferencia de prensa, Harfuch reconoció que Wedding se encuentra en la lista de los 10 fugitivos más buscados por el Buró Federal de Investigaciones (FBI), en Estados Unidos. Esto debido a su involucramiento en el tráfico de drogas internacional.
De acuerdo con autoridades estadounidenses, Wedding encabeza una organización criminal que envía cocaína desde Sudamérica a Canadá. Se presume que este sujeto actualmente reside en México, razón por la cual se ha solicitado a la presidenta Claudia Sheinbaum emprender acciones contra el extranjero.
Bajo ese tenor, García Harfuch indicó que el Gabinete de Seguridad de México ha trabajado de manera coordinada con Estados Unidos para detener este narcotraficante y otros objetivos criminales.
Omar García Harfuch aseguró que el caso del narcotraficante canadiense James Ryan Wedding no es «especial» (Foto: REUTERS/Raquel Cunha)
“Esta persona canadiense está entre los 10 más buscados (…) Sí hay una investigación en curso, por supuesto. Hay coordinación con autoridades de Estados Unidos. Pero no es el único objetivo”, señaló Harfuch.
Agregó que cada semana hay reuniones en el Gabinete de Seguridad para tomar acciones y detener a personas que son buscada en el extranjero. Sin embargo, aseguró que el caso de James Ryan Wedding no ocupa un lugar preponderante.
“No es un caso especial para nosotros. Es otro delincuente con orden de extradición que se encuentra en una lista como los otros que hemos detenidos”, aseveró el secretario de Seguridad.
Por su parte, la presidente Claudia Sheinbaum reiteró que hay una colaboración permanente entre la Fiscalía General de la República (FGR) y el Departamento de Justicia del país vecino para atender este tipo de casos.
Foto: FBI
“Cuando hay una petición de alguien que tiene una investigación en Estados Unidos, se colabora como siempre se ha hecho”, apuntó Sheinbaum al respecto.
Estos cuestionamientos se derivaron de la petición que hizo el día de ayer F. Cartwright Weiland, funcionario de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley (INL), durante su participación en la 68ª Comisión de Estupefacientes de la ONU.
El funcionario estadounidense apreció el enfoque adoptado por Sheinbaum para atender el tráfico de drogas, pero indicó que México podría tomar acciones más contundentes contra narcotraficantes de alto perfil, como James Wedding, quien es buscado en el país vecino.
USD 10 millones por la captura de Wedding
Antes de ser buscado por el FBI, Ryan James Wedding fue un deportista. En el año 2002 representó a Canadá en los Juegos Olímpicos, en la categoría “eslalon gigante paralelo” de snowboard.
Tras su breve carrera en el deporte, Wedding comenzó a involucrase en actos de narcotráfico. En el Distrito Central de California, en Estados Unidos, fue acusado de dirigir una empresa criminal continua, asesinato y posesión de droga.
Debido a sus actividades criminales, la semana pasada fue integrado a la lista de los 10 fugitivos más buscados por el FBI. Actualmente se ofrece una recompensa de hasta USD 10 millones a cambio de información que lleve a su captura o paradero.
El Gobierno de México y Estados Unidos fortalecieron su cooperación para la gestión del agua en la cuenca del Río Bravo, tras varias semanas de negociaciones, y acordaron iniciar entregas de agua a partir del 15 de diciembre, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores mediante un comunicado.
Ambos países coincidieron en la importancia de cumplir con las obligaciones establecidas en el Tratado de Aguas de 1944, instrumento que regula la distribución del recurso hídrico y la administración de aguas compartidas entre las dos naciones. Como parte del acuerdo, México liberará un volumen de 249 mil 163 millones de metros cúbicos de agua para Estados Unidos, conforme a los términos del tratado.
La Secretaría de Relaciones Exteriores precisó que las entregas se realizarán dentro del marco legal vigente, respetando la disponibilidad hidrológica y los límites operativos establecidos, sin afectar el suministro de agua para consumo humano ni la producción agrícola en la región fronteriza.
El entendimiento se consolidó después de que el 8 de diciembre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reclamara a México el adeudo de agua correspondiente y advirtiera sobre la imposición de aranceles de 5 por ciento en caso de incumplimiento. Un día después, el 9 de diciembre, se llevó a cabo de manera virtual la quinta reunión binacional del año para dar seguimiento a las entregas y evaluar la situación técnica.
En dicho encuentro participaron funcionarios de alto nivel de ambos gobiernos. Por parte de México asistieron el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué; el subsecretario para América del Norte y encargado del despacho de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Roberto Velasco; y el titular de la Comisión Nacional del Agua, Efraín Morales. Por Estados Unidos participaron la secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, y el subsecretario de Estado, Christopher Landau.
El Tratado de Aguas de 1944 no solo contempla la entrega de agua, sino también la generación de energía eléctrica, el control de avenidas, obras de saneamiento del río Tijuana y la operación de las presas internacionales Falcón y La Amistad. Ambos gobiernos señalaron que han trabajado de manera coordinada para atender el ciclo actual y cubrir el déficit del ciclo anterior, conforme a lo establecido en el Artículo 4 del acuerdo.
Las autoridades destacaron la necesidad de mantener el diálogo técnico a través de la Comisión Internacional de Límites y Aguas y la International Boundary and Water Commission, con el objetivo de garantizar la sostenibilidad del recurso hídrico y la protección de la población y la agricultura frente a la sequía histórica. Con este acuerdo, México reiteró su compromiso con los tratados internacionales y la cooperación bilateral en materia de agua.