Una fiesta de revelación de género de un bebé en la localidad de Kingston (Nuevo Hampshire, EE.UU.) terminó el pasado martes con una fuerte explosión después de que los participantes detonaran una gran cantidad de explosivos. El estallido fue tan potente que hizo temblar el suelo.
Algunos residentes de la zona contaron a medios locales que llegaron a pensar que se había producido un terremoto. Sin embargo, los agentes que acudieron al lugar de los hechos descubrieron que el temblor fue causado por la explosión de más de 35 kilos de Tannerite, un explosivo de venta libre que se utiliza habitualmente para hacer visibles los objetivos alcanzados en los campos de tiro.
El estallido fue grabado por una cámara de timbre instalada en una casa cercana. En el video se puede ver cómo el suelo tiembla tras la explosión.
«Un detective de la Policía de Kingston se reunió con las personas que se encontraban en el lugar […] y les informaron que estaban celebrando una fiesta de revelación de género», detallaron las autoridades. «Durante la investigación, el detective fue informado de que el lugar, una cantera, fue elegido ya que consideraban que era un lugar seguro para detonar Tannerite», agregó.
La Policía señaló que el hombre que compró y detonó el explosivo se entregó y está cooperando con la pesquisa. Los investigadores aún están determinando qué cargos se pueden presentar contra él.
Afortunadamente, no se reportaron heridos. Por su parte, algunos vecinos denunciaron que la explosión provocó daños materiales en sus propiedades. «Fue un gran estallido y un crujido, fue muy fuerte, sacudió todo mi porche», contó la residente local Tina Bouraphael, agregando que el incidente causó múltiples grietas en los cimientos de su casa.
«Una revelación de género que se escuchó no solo en todos los barrios, sino en muchos, muchos pueblos», dijo otra vecina, Sara Taglieri. «No estoy disgustada porque me hayan tirado tiza o confeti en mi camino, me refiero a que fue una explosión que sacudió mi casa, mis vecinos, mi comunidad y mi ciudad. Es absolutamente exagerado, ridículo», añadió.