Ya está todo listo para el parto, aseguran en el PRI, pues luego del desorden que se ha generado no sólo en Chihuahua, sino en buena parte de las gubernaturas que estarán en juego el próximo año, el CEN del PRI encabezado por Manlio Fabio Beltrones tiene como propósito alcanzar el éxito en al menos ocho elecciones, incluida Chihuahua, y todo dependerá de elegir a los candidatos adecuados, pues el panorama no pinta nada fácil para el tricolor.
Para ello, tanto en Chihuahua como en otros estados, se cuenta ya con encuestas de empresas locales y nacionales, pedidas supuestamente objetivas, sin resultados inflados para ninguno de los aspirantes, con el fin de tener un panorama real de las oportunidades y preferencias, que influya en la toma de decisiones, pero aún así nadie confía.
Otros factores de peso serán las posturas de los líderes partidistas, comenzando por el mero mero Enrique Peña Nieto y su círculo cercano, los que mandan en el CEN del PRI, los líderes ocultos, los jefes parlamentarios César Camacho y Emilio Gamboa, y por supuesto los gobernadores. Pero que nadie se confunda, todos tienen derecho a voz, pero será el presidente quien tendrá la última palabra.
Hay otro factor que los aspirantes y sus seguidores parecen haber desestimado, y es el de los nexos (comprobables) con el crimen organizado y actividades ilícitas, pues si a Osorio Chong y su gente se les peló el ‘Chapo’ en las narices, fue porque estaban concentrados de lleno en usar el Cisen como una veta de información valiosísima para sus intereses políticos, con los cuales pueden acorralar a unos y promover a otros. Todos tienen su colita que les pisen, cortita o larga.
Volviendo al caso específico de Chihuahua, el Comité Ejecutivo Nacional ya está haciendo los ‘castings’ a los aspirantes, que ya han pasado por las oficinas nacionales pero será este viernes cuando se reúnan todos con Beltrones, quien podría darles la buena o la mala, aunque sabemos que será sólo una la persona designada. Muchos afirman que la decisión ya fue tomada, y que sólo se les comunicará despacito, con todas las formas, para mantener en lo posible la unidad y disciplina que se le fueron de las manos al gobernador.
Y hablando del gobernador, ayer estuvo muy contento durante la visita del secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, quien vino a presumir que en Chihuahua se invierten más de 11 mil millones de pesos, una cifra sin precedentes, sobre todo destinado a carreteras, distribuidores viales y otras obras de infraestructura para la circulación, lo típico.
Y nomás para no dejar, entregó 19 mil 500 televisiones digitales de las 190 mil que se repartirán en todo Chihuahua, pues desde luego mantener a la gente bien entretenida en sus casas es prioridad de este gobierno. No importa que no haya medicinas en los hospitales, que las ciudades parezcan un paisaje lunar por los baches, que la gente se muera de hambre en la sierra, lo importante es que nadie se pierda la novela. Lo que no ha quedado claro es bajo qué criterios se entregarán, pues parece que quienes rellenarán los padrones serán los seccionales-funcionarios del PRI, con base en las prácticas clientelares de toda la vida
Pero volviendo al tema del gobernador César Duarte, sorprendió la declaración que hizo a cientos de reporteros durante el convivio navideño, a quienes les dijo que prefería que lo señalaran por los delitos de enriquecimiento ilícito, peculado, abuso de atribuciones, entre otras transas, y no de matadera como en años anteriores.
Su curiosa postura coincidió con el Día Internacional contra la Corrupción, en la que el Gobierno del Estado difundió en redes sociales una lámina donde se sumaba (de hablada) a esta campaña, la cual fue bombardeada con cientos de comentarios negativos y hasta insultos, pero todo fue borrado por los Duartebots que operan en Palacio y si usted la busca encontrará sólo felicitaciones de gente que vive de la administración pública priísta o en otras partes del mundo, pues cuenta con muchos perfiles falsos.
Fue precisamente durante este evento que un joven activista vinculado a Unión Ciudadana, el grupo grilleril encabezado por Javier Corral y Jaime García Chávez, encaró al gobernador y trató de regalarle un pastel por el ‘Día de la Corrupción’. Tras un tosco intercambio de palabras el joven fue sometido por los escoltas.
Horas después Sergio Valles, titular del Canal 28, denunció públicamente que existe la instrucción de «callarlos» a como dé lugar, y acusó a Jaime Herrera, secretario de Finanzas, de haber tratado de tenderle una trampa para acusarlo de extorsión, en la que finalmente no cayó.
El que anduvo ahí pegadito, estrenando puesto, fue Eugenio Baeza Fares, quien no se separó del mandatario ni un segundo, como pollito detrás de su gallina. También se dio su baño de pueblo en la posada con representantes de casi 700 comités vecinales, donde fue perdiéndole el miedo a convivir con los de abajo y así encajar mejor en su papel.
El que también anda lucido es el director de Desarrollo Urbano y Ecología, Maurilio Ochoa Millán, quien quiere demostrar que trae muchos huevos y por eso quiere darle un buen fin a uno de los mayores fracasos de la administración de César Duarte: el transporte público.
Con su fino pero contundente perfil de negociador, está convenciendo a los concesionarios de transporte público de entrarle a la compra de cerca de 400 unidades de transporte público nuevecitas, las cuales alimentarían las rutas troncales de la capital, cada una con capacidad para 56 pasajeros.
Pero si usted le echa un ojo a su foto de perfil en Facebook, notará que lo de los huevos se lo tomó literal y sale con ellos en la mano. En las fotos no se ve a un funcionario sino a un candidato que trae toda la intención de pelear la alcaldía de Chihuahua.
Para finalizar, está el caso del secretario del Trabajo y Previsión Social, Fidel Pérez Romero, quien no ve problema en que los trabajadores de Juárez se partan el lomo más de nueve horas por 100 pesos diarios. Tampoco el que se vean violados sus derechos laborales y hasta humanos, mucho menos halla conflicto en la miseria y abandono social que viven. Para él, el problema son los abogados leguleyos que tienen la osadía de defenderlos, y afirma que ese es el origen de los paros en maquiladoras de Juárez.
Así lo dejó claro ayer durante su comparecencia ante la Comisión Laboral del Congreso del Estado, en el que alegó que el costo por demandas laborales en la entidad es de un billón de pesos, un lanonón que podría quebrar a toda la IP, y afirmó que su lucha es contra los abogados que demandan a lo loco, viendo qué pega y quedándose con lo que les toca a los trabajadores.
No se puede negar que hay mucho de esto. La Junta Local era y sigue siendo un nido de coyotes que despojan de su patrimonio a pequeños changarros, pero una cosa muy distinta es el monstruo maquilador, que subcontrata por outsourcing, cuenta con verdaderos ejércitos legales y viola reiteradamente los derechos laborales más básicos de los trabajadores con todo el apoyo de la autoridad, encarnada en Fidel Pérez Romero ¿cómo lo habrán convencido?