Participantes y activistas de la organización feminista ‘Non Una Di Meno’ (ni una menos) sostienen bengalas mientras se enfrentan a la policía durante una protesta con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la MujerCréditos: EFE/EPA/ALESSANDRO DI MARCO
En el día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, miles de italianos se han congregado en las calles de Roma, Milán, Turín y otras grandes ciudades del país.
Roma.- Decenas de miles de italianos protestaron hoy, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en las calles Roma, Milán, Turín y otras grandes ciudades del país, conmocionado por el reciente asesinato de una joven de 22 años a manos de su exnovio.
La sociedad italiana permanece bajo el impacto del feminicidio de Giulia Cecchettin, de 22 años, que fue asesinada por su exnovio en el norte del país justo antes de su graduación en Ingeniería Biomédica, un caso que ha abierto una profunda reflexión sobre la violencia de género en los medios de comunicación.
En Roma, más de 50 personas, de acuerdo con los medios locales, se congregaron en el Circo Massimo convocadas por el colectivo «Non una di meno» (Ni una menos) para urgir el final de esta lacra y con el recuerdo de Cecchettin muy presente.
Activistas de la organización feminista ‘Non Una Di Meno’ (ni una menos) protestan con pancartas con ocasión del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Créditos: EFE/EPA/ALESSANDRO DI MARCO
«Por Giulia, por todas: un grito de batalla» y «somos el grito muy fuerte y feroz de todas aquellas mujeres que ya no tienen voz» fueron algunas de las consignas que se escucharon en la capital italiana.
Aunque el lema más repetido fue «si mañana me toca a mí quema todo» («se domani tocca a me brucia tutto» en italiano), frase procedente de unos versos que la peruana Cristina Torres-Cáceres escribió contra la violencia machista en Latinoamérica y que estos días inundan las redes sociales de mujeres en toda Italia.
A la protesta también se desplazó la socialdemócrata y líder de la oposición, Elly Schelin, del Partido Demócrata (PD), quien señaló que la manifestación era «para Giulia y para todas las mujeres asesinadas por la violencia machista y que sufren cada día otras formas de violencia».
Activistas de la organización feminista ‘Non Una Di Meno’ (ni una menos) protestan con pancartas con ocasión del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Créditos: EFE/EPA/ALESSANDRO DI MARCO
En lo que va de año han sido asesinadas 106 mujeres por sus parejas o exparejas, según los datos de la policía italiana.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, dio un discurso en la noche del viernes en el que afirmó «somos libres y nadie nos puede quitar la libertad» y recordó que la instituciones están para servir a las mujeres, tras insistir en que las víctimas contacten al 1522, el teléfono italiano de atención a las víctimas de violencia de género.
En la jornada del 25N se iluminarán de rojo monumentos y edificios de Roma como el Coliseo y Palazzo Chigi, la céntrica sede del Ejecutivo italiano.
En Milán (norte) más de 30 mil personas salieron a la calle, en Torino (norte) las protestas contaron con 8.000 asistentes y en Palermo (sur) fueron centenares los manifestantes, según la prensa local.
Esta misma semana, el Instituto de Estadística Italiano (Istat) publicaba un informe sobre los estereotipos de género entre los italianos que demuestra el largo camino por recorrer en la sociedad italiana para alcanzar la igualdad.
El 19,7 por ciento de los hombres italianos, uno de cada cinco, considera que la manera de vestir de las mujeres puede ser una causa de violencia sexual, un argumento que comparte el 16,6 por ciento de las italianas, según esos datos.
Activistas de la organización feminista ‘Non Una Di Meno’ (ni una menos) protestan con pancartas con ocasión del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Créditos: EFE/EPA/ALESSANDRO DI MARCO
Además, en torno al 10 por ciento de los hombres y mujeres encuestados coinciden en atribuir responsabilidad a una mujer víctima de violencia sexual en los supuestos de que esté bajo los efectos del alcohol o de que acepte la invitación de un hombre después de una fiesta.
Y el 10,2 por ciento de los adultos del país considera «aceptable» que un hombre controle habitualmente el teléfono o la actividad en redes sociales de su pareja o esposa, algo que apoyan el 16 por ciento de los jóvenes entre 18 y 29 años.
Respecto a la violencia física, el 2,3 por ciento de las personas aceptan que «siempre o en algunas circunstancias» un chico «abofetee a su novia porque ella coqueteó con otro hombre» y para el 4,3 por ciento de los italianos «siempre o en algunas circunstancias» es tolerable que «una pareja reciba una bofetada de vez en cuando».
Un nuevo paquete de documentos vinculados al caso de Jeffrey Epstein, difundido por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, incluye múltiples referencias al presidente Donald Trump y a presuntos viajes que habría realizado en el avión privado del fallecido financiero durante la década de 1990. Los archivos citan que Trump habría volado en al menos ocho ocasiones entre 1993 y 1996, en algunos trayectos junto a Epstein, Ghislaine Maxwell y una mujer identificada como de 20 años en ese momento.
De acuerdo con un correo electrónico fechado el 7 de enero de 2020 y enviado por la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York, los registros de vuelo recibidos entonces reflejarían que Trump viajó en el jet de Epstein más veces de lo que se había reportado previamente. El mensaje señala que en al menos cuatro vuelos Maxwell también figuraba como pasajera y que en dos trayectos viajaron mujeres que podrían haber sido posibles testigos en el caso en su contra.
El mismo correo detalla que en un vuelo de 1993 Epstein y Trump habrían sido los únicos pasajeros, mientras que en otro viaje aparecían Epstein, Trump y una mujer de 20 años cuyo nombre fue censurado. No existe indicio de que dicha mujer haya sido víctima de algún delito, y la inclusión de nombres en los archivos no implica, por sí misma, la comisión de un crimen.
La publicación de estos documentos se suma a una liberación previa de archivos relacionados con las investigaciones sobre Epstein. Durante su campaña presidencial más reciente, Trump prometió hacer públicos materiales vinculados al caso. Sin embargo, en verano, el Departamento de Justicia generó críticas al anunciar que no divulgaría expedientes adicionales y que no había encontrado una lista incriminatoria de clientes.
Ante la nueva difusión, el Departamento de Justicia afirmó que se liberaron casi 30 mil páginas más y que algunos documentos contienen señalamientos falsos y sensacionalistas contra Trump, presentados al FBI antes de la elección de 2020. En un comunicado, la dependencia aseguró que esas afirmaciones carecen de sustento y que, de haber sido creíbles, ya se habrían utilizado en su contra.
Trump ha negado de manera reiterada cualquier conocimiento o participación en las actividades criminales de Epstein. Ambos mantuvieron una relación social durante años, la cual, según registros públicos, se rompió en 2004.
Entre los documentos también figura una carta atribuida a Epstein y dirigida a Larry Nassar, exmédico del equipo de gimnasia de Estados Unidos, cuya autenticidad fue objeto de un análisis de escritura solicitado por el FBI. Epstein fue hallado muerto en su celda en agosto de 2019; su muerte fue clasificada como suicidio.