La chequera única que puso el Instituto Nacional Electoral (INE) a disposición de los 10 partidos políticos para administrar parcial o totalmente los 5 mil 356 millones de pesos que recibirán este año en prerrogativas quedó en letra muerta, a pesar de que se creó como una opción para garantizar la transparencia en el uso de los recursos, la realización de pagos en forma oportuna, el cumplimiento de las disposiciones en materia fiscal y la conciliación de saldos.
Ningún partido político aceptó el derecho que tenían para que sus finanzas fueran ejercidas directamente con cargo a sus ministraciones por parte de la Unidad Técnica de Fiscalización del INE.
Prefirieron no rendir cuentas al INE de los 5 mil 356 millones 771 mil 247 pesos que reciben este año de financiamiento público, que se desglosa en los rubros: actividades ordinarias permanentes, que asciende a tres mil 909 millones 545 mil 803 pesos; gastos de campaña, por mil 172 millones 863 mil 740; actividades específicas, referentes a asesorías y capacitación de mujeres, de 117 millones 286 mil 374 pesos; franquicias postales, de 156 millones 381 mil 832 y franquicias telegráficas, de 693 mil 497 pesos.
El Consejo General del INE dio tres opciones a los partidos políticos para que utilizaran la chequera única: solo para los gastos del periodo ordinario, para los gastos de campaña, o bien para el pago de la publicidad en espectaculares o medios impresos.
O bien podían optar por una sola opción, por las tres o una combinación, pero al final los 10 partidos decidieron no ejercer la chequera, instrumento novedoso que también busca la rendición de cuentas en el uso de los recursos.
Los lineamientos para la realización de pagos de los partidos políticos o coaliciones que aprobó el Consejo General del INE respondió a la reforma electoral del artículo 41 de la Constitución, a la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales y a la Ley General de Partidos Políticos.
El consejero electoral Marco Antonio Baños dijo que la chequera única corresponde a uno de los temas novedosos de la reforma, pero que tendrá que esperar para ponerse en práctica en otro proceso electoral.
En entrevista, mencionó que los partidos políticos tienen el derecho a meditar si quieren o no que sus finanzas sean ejercidas directamente con cargo a sus prerrogativas por parte del INE, que generó desde el pasado febrero las condiciones para que se aplicara en este proceso electoral.
Baños opinó que los partidos políticos «se perdieron de una experiencia para saber cómo funciona en la práctica una novedad que resulta importante en el manejo de los recursos públicos, pero también el INE perdió la oportunidad para saber cómo se organizaría para atender la solicitud de pago con cargo a una chequera única de un partido».
Para el consejero, el hecho de que los partidos políticos no hayan aceptado la opción de este esquema de revisión no afecta ninguna situación para que el INE revise el ejercicio del gasto tanto del dinero que reciben de donaciones, de aportaciones de la militancia y del financiamiento público.
Afirmó que tendrán los mismos controles y rigurosidad en términos de la fiscalización, al explicar que la chequera única significaba la posibilidad de que con cargo a las prerrogativas el INE pagara directamente, pero insistió en que los consejeros son respetuosos de la decisión de los partidos políticos.
Los partidos políticos contratarían de manera directa y validarían la entrega de los servicios y productos que adquirieran y el INE solo pagaría.
«Al final de cuentas los partidos políticos son los que tienen que ir autorizando las erogaciones que hace el Instituto Nacional Electoral, porque ellos (los partidos políticos) contratan de manera directa y ellos son los que validan la entrega de los servicios y de los productos que adquieren con los proveedores», explicó.
En los lineamientos se explica que la Unidad Técnica de Fiscalización tendrá la facultad de pagar las obligaciones que contraigan los partidos políticos, ya sea de la totalidad de gastos o bien únicamente por lo que hace a propaganda en la vía pública, a través de una de las chequeras que por cada tipo de campaña se instituya, pero acota que cada partido será responsable de su contabilidad y de la operación del sistema de contabilidad.
La propaganda en la vía pública hace referencia a toda la propaganda que se contrate o se difunda en espectaculares, buzones, cajas de luz, carteleras, marquesinas, muebles urbanos de publicidad con o sin movimiento, muros, panorámicos para buses, puentes, vallas, vehículos o cualquier otro medio similar.
El consejero admitió que con el mecanismo de chequera se pudo evitar que los partidos recurrieran a la práctica de comprobar sus gastos con facturas falsas; no obstante, refrendó que el INE tiene mecanismos para detectar los documentos que no cumplan con todas las disposiciones legales y corregir la fiscalización de los partidos.
Fuente: Milenio