Gallo de sangre caliente, hombre de campo, valiente y gran agricultor.
Estas son algunas de las aduladoras descripciones que abundan en internet de Jaime Rodríguez Calderón alias «El Bronco», quien pasará a la historia de México por convertirse, de confirmarse los resultados preliminares de las elecciones de este domingo, en el primer candidato independiente que gana una gobernatura.
«El Bronco» se presenta como un hombre del pueblo, ranchero. Se deja grabar a menudo a lomos de un caballo y usa un lenguaje cercano a la gente.
«La gente necesita un cabrón como yo», dijo en una ocasión durante una entrevista.
Pero El Bronco no siempre fue independiente. Durante 33 años perteneció al PRI, el Partido Revolucionario Institucional, del que se desmarcó en septiembre de 2014 para buscar su postulación como independiente al gobierno de Nuevo León, uno de los motores económicos del país.
Este carismático «caballo sin domar» de 58 años de edad cobró notoriedad pública como alcalde del municipio de García, Nuevo León, cuando a partir de 2010 hizo de su enfrentamiento a la delincuencia organizada su bandera.
Así, combatió a los narcotraficantes y se embarcó en un proceso de limpieza de las fuerzas policiales municipales que, según él, hizo que «la ciudad despertara y empezara a perder el miedo».
También le hizo ganar enemigos. Sobrevivió a dos atentados y vivió el secuestro de su hija de dos años.
Su vida y obra aparece glorificada en varios corridos y hasta en una película, «Un Bronco sin miedo», publicados en You Tube.
De hecho, el buen manejo de las redes sociales fue clave para el éxito de su campaña política: desde la recogida de firmas necesaria para poder postularse como candidato independiente, hasta el éxito en las urnas de este domingo.
«El Bronco» fue también uno de los candidatos más seguidos por los medios de comunicación.
«Un riesgo», «populista» y «encantador de serpientes»
Sus rivales le han criticado lo que consideran es su actitud populista y su lenguaje inapropriado.
Pero al Bronco no he han faltado críticos.
Como era de esperarse, en las semanas previas a las elecciones salieron a la palestra muchos trapos sucios, en una campaña electoral en la que no faltaron los ataques personales a los candidatos.
Su ex esposa, Silvia González, salió en medios de comunicación diciendo que el candidato independiente le pegó en frente de su hija en 2003 y que esa fue la principal razón por la que decidió divorciarse.
El ex presidente de México Felipe Calderón, del Partido de Acción Nacional, dijo de su candidatura que era un «fenómeno peligroso» y lo comparó con el ex presidente de Venezuela Hugo Chávez y con Andrés Manuel López Obrador, dirigente de izquierda mexicano.
«Esos perfiles que mandan al diablo a las instituciones tienen cierto carisma y terminan siendo gobiernos personalistas, muy dictatoriales e ineficientes, y eso me preocupa en Nuevo León», dijo Calderón durante una entrevista con Milenio antes de las elecciones.
Otros rivales han criticado en líneas similares lo que consideran es su actitud populista y su lenguaje inapropriado.
«Muchos dicen que es un encantador de serpientes, y no dudo que lo sea, ya que de alguna manera ha metido a su juego a personas muy distinguidas», le dijo a Milenio el ex alcalde de Guadalupe y y ex procurador de Justicia del Estado, Juan Francisco Rivera Bedoya, del partido PRI al que El Bronco pertenecía hasta el año pasado.
También lo persiguió en las últimas semanas la sombra de un oscuro incidente por un conflicto de tierras que ocurrió en 2010 mientras era alcalde de García Nuevo León.
Una señal de descontento
A la vista de los resultados preliminares, Jaime Rodríguez, «El Bronco», se declaró vencedor en Nuevo León.
En las encuestas previas a las elecciones El Bronco ya se perfilaba como el candidato puntero en el estado de Nuevo León.
A la espera de los resultados oficiales, las encuestas a boca de urna del domingo le otorgan el 45% de los votos.
Por eso Jaime Rodríguez, «El Bronco», ya se declaró vencedor de los comicios.
Su irrupción en la escena política nacional, aseguran analistas, se observa cómo una señal del descontento existente con los partidos políticos y el desgaste que sufren.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, confirmó este jueves que durante su viaje a Washington para participar en el sorteo del Mundial de Fútbol 2026 sostendrá una «pequeña reunión» con el presidente estadounidense Donald Trump, el primer encuentro en persona entre ambos mandatarios.
«Vamos a tener una pequeña reunión con el presidente Trump, y otra con el primer ministro (Mark) Carney», señaló la mandataria durante su conferencia de prensa matutina, aunque no brindó mayores detalles sobre los temas que se abordarán.
Sheinbaum informó que viajará este jueves por la noche a Washington en un avión de la Secretaría de la Defensa Nacional, ya que debido a los tiempos no podría hacer uso de aerolíneas comerciales. Precisó que el encuentro con Trump y Carney ocurrirá momentos antes del inicio del sorteo del Mundial, del cual México, Estados Unidos y Canadá son coanfitriones.
Como países organizadores, las tres naciones ya tienen asignado el grupo del que serán cabeza de serie. La FIFA determinó que México encabezará el Grupo A y tendrá el partido inaugural el jueves 11 de junio de 2026 en el Estadio Azteca. Canadá lidera el Grupo C, mientras que Estados Unidos encabezará el Grupo D.
La ceremonia, donde se revelará el destino de las 48 selecciones nacionales participantes, está programada para este 5 de diciembre. Al día siguiente se dará a conocer el calendario de partidos y los estadios sede.
Tras su participación en el sorteo, Sheinbaum tendrá una reunión con mexicanos que viven en Estados Unidos y regresará el viernes por la noche a la Ciudad de México para encabezar el sábado la celebración del aniversario del inicio de gobierno de Morena en el Zócalo capitalino.
La reunión ocurrirá después de que Trump indicara el miércoles que posiblemente dejará expirar el T-MEC y buscará un nuevo acuerdo comercial con sus vecinos.