Los cadáveres de dos personas que exhibían signos de tortura fueron colgados en un puente carretero de Michoacán, informó este viernes la fiscalía local, que sospecha se trata de una acción del crimen organizado.
Automovilistas que pasaban esta mañana por la autopista que conecta Michoacán con el céntrico estado de México se percataron de la presencia de los cuerpos de dos varones jóvenes y dieron parte a la autoridades, dijo a la AFP Magdalena Guzmán, portavoz de la fiscalía de Michoacán.
«Hasta el momento, se desconocen la identidad de los muertos, así como el móvil del crimen, aunque por las características se presume que una organización criminal podría estar detrás del hecho», precisó la funcionaria.
Los cuerpos, que fueron atados con alambre y sogas del puente, serán trasladados al Servicio Médico Forense de Morelia, capital estatal.
Los cárteles narcotraficantes que operan en México suelen asesinar a sus enemigos o víctimas para luego exponer sus cuerpos en vías públicas, a veces con partes cercenadas.
Los macabros hallazgos de cadáveres colgados de puentes llegaron a ser casi cotidianos en años pasados, aunque últimamente se volvieron mucho menos frecuentes.
La localización de los dos cuerpos en Michoacán ocurre un día después de la renuncia del secretario de Seguridad Pública Estatal, Javier Ocampo.
El mes pasado también renunció el fiscal local y unos 180 agentes de su oficina, todos ellos argumentando razones personales.
Michoacán estuvo asolado durante años por Los Caballeros Templarios, un sanguinario cártel narcotraficante que tejió vínculos con las autoridades locales.
Tras el levantamiento de las ahora demovilizadas milicias de autodefensas y una intensa intervención de las fuerzas federales, el cártel quedó desmantelado con la captura o abatimiento de sus principales líderes.
Fuente: El Economista