Periodistas y público en general en todo Estados Unidos rindieron tributo hoy a dos periodistas de televisión, asesinados la víspera durante una transmisión en vivo en el estado de Virginia.
Alison Parker, reportera de 24 años de la estación WDBJ y el camarógrafo Adam Ward, de 27 años, fueron ultimados por Vester Flanagan, un exempleado de la televisor despedido hace dos años por conductas “erráticas”.
Parker y Ward son los primeros representantes de los medios asesinados en Estados Unidos desde 2007.
La televisora con sede en la ciudad de Roanoke guardó un minuto de silencio a la misma hora que ocurrió el atentado la víspera, en medio de emotivas muestra del personal de la estación.
El museo dedicado a la prensa en la capital estadunidense conocido como Newseum rindió tributo a los periodistas caídos exhibiendo un texto alusivo y las últimas imágenes de Parker y Ward antes del incidente fatal.
La propuesta de la productora Vicki Chen de la televisora KVUE en Austin, Texas para usar el mensaje #WeStandWithWDBJ en las redes sociales tuvo resonancia en representantes de los medios en todo el país.
Equipos enteros de transmisión en repetidoras en Nueva York, Nueva Jersey, Dallas, Georgia y Utah, entre decenas de medios electrónicos, publicaron su apoyo a la televisora de Virginia mostrando el mensaje de solidaridad de Chan.
Otros periodistas dedicaron su trabajo este jueves a Parker y Ward al inicio de sus transmisiones.
El Club Nacional de Prensa en Washington también recordó a los dos miembros de los medios.
En tanto, cientos de flores, globos y veladoras continúan siendo depositados a las afueras de la televisora en la ciudad con menos de 100 mil habitantes al sur del estado de Virginia.
Andy Parker, padre de la reportera asesinada, señaló en entrevista con la cadena CNN que ha recibido condolencias de todos los rincones de Estados Unidos.
Parker apuntó que se dedicará a hacer activismo político para cambiar las legislaciones a fin de endurecer el acceso a las armas de fuego.
A su vez, la policía reveló este jueves que fueron encontrados en el carro de Flanagan tres placas de automóvil, municiones para la pistola Gluck con la que cometió los asesinatos y una peluca.
Fuente Excélsior