La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) dijo el viernes que pondrá en marcha cambios radicales en la forma en la que realiza pruebas de emisión de diésel tras ser engañada con un software clandestino en los autos Volkswagen por siete años.
En una carta dirigida a empresas automotrices, la EPA dijo que efectuará pruebas en carretera en las que «usará ciclos de manejo y condiciones que se podrían encontrar razonablemente en una operación y uso normal para los propósitos de investigar un posible aparato engañoso» similar al usado por Volkswagen.
Las pruebas se agregarán a los análisis de emisiones que se realizan regularmente, agregó la EPA.
El avanzado programa de VW permitió que sus autos pasaran pruebas de laboratorio y que emitieran su contaminación a la atmósfera después, cuando estaban en carretera. Los cambios anunciados el viernes están diseñados para detectar software y otros métodos que los fabricantes de autos podrían usar para engañar.
«Queremos asegurarnos de que éste sea un caso único», dijo el viernes la administradora de la EPA Gina McCarthy.
La revelación sobre VW también puso a la agencia bajo escrutinio. Sus pruebas han sido criticadas por predecibles y anticuadas, lo que hizo relativamente fácil el engaño de la automotriz alemana.
Chris Grundler, director de la oficina de transporte y calidad de aire de la EPA, defendió las pruebas de la agencia argumentando que los vehículos de pasajeros con motores diesel suman menos del uno por ciento de todas las emisiones de vehículos de dióxido de nitrógeno y otros contaminantes.
De hecho, la agencia no descubrió inicialmente el problema, los investigadores en la Universidad de West Virginia lo hicieron usando una prueba en carretera que la EPA no realizaba.
VW comenzó su ardid en 2009, y quizá no habría sido descubierta sin la investigación de la universidad a nombre del Consejo Internacional para el Transporte Limpio, un grupo sin fines de lucro que da observaciones a los gobiernos sobre sus leyes.
Los reguladores de la EPA y California confrontaron a VW con sus resultados en 2014. Y la fabricante de autos retiró algunos modelos el año pasado sin mejorar mucho, dijo la agencia.
Sólo cuando la EPA y la Junta de Recursos Atmosféricos de California (CARB por sus siglas en ingles) se negaron a aprobar que salieran a la venta los modelos diésel de VW para 2016 la compañía admitió este mes lo que había hecho.
El caso de la automotriz alemana es similar a los que han involucrado a los interruptores de encendido defectuosos de General Motors y las bolsas inflables explosivas de Takata Corp., en los cuales también pasaron años antes de que fueran revelados a los consumidores.
Fuente El Financiero