El diputado Rosemberg Loera Chaparro, del Partido Nueva Alianza presentó una iniciativa con carácter de Acuerdo, con el fin de proponer ante la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, reformas a diversas disposiciones de la Ley de Aguas Nacionales, así como la Ley Federal de Derechos.
La finalidad –explicó- es en ambos casos, con el propósito de favorecer la acuacultura nacional.
Loera Chaparro recordó que las Comisiones Unidas de Agua Potable y Saneamiento, y de Recursos Hidráulicos, aprobaron en sentido positivo el proyecto de decreto por medio del cual, a partir de una iniciativa presentada apenas un mes antes, se pretendía expedir la Ley General de Aguas, con el propósito de actualizar el marco jurídico que rige actualmente en materia de aguas nacionales.
El dictamen referido fue programado para ser votado ante el Pleno Legislativo el día martes 10 de marzo de 2015; sin embargo, ante la inconformidad y la exigencia de una consulta más amplia manifestada por investigadores, académicos y Organizaciones de la Sociedad Civil, el dictamen no se presentó ante la Cámara de Diputados, quedando de esta manera sin concluirse el proceso correspondiente.
El documento fue regresado de nuevo a las comisiones competentes de la LXII Legislatura federal, concluyendo ésta su periodo sin haberse emitido la nueva normatividad en materia de aguas nacionales.
Ante ello –dijo- el Grupo Parlamentario del Partido Nueva Alianza, considera de gran importancia la oportunidad de realizar propuestas para ser incluidas en la ley, todas ellas relacionadas con la acuacultura, una actividad que a pesar de la gran importancia que ha adquirido vinculada con la política alimentaria y económica de México y el mundo, no ha sido fortalecida jurídicamente en proporción al beneficio nacional que aporta.
“El objetivo es significar en la agenda nacional la actividad acuícola y por ende, la suficiencia alimentaria, el autoempleo y el desarrollo financiero de Chihuahua, y consecuentemente, de nuestro país”, detalló el legislador.
Recordó que la acuacultura es sin duda una alternativa alimentaria y económica realmente sustentable, para la cual el uso del agua es, naturalmente, la base fundamental de su desarrollo; sin embargo, a pesar de que requiere del vital líquido para llevarse a cabo, es una de las pocas actividades productivas que no lo consume, solamente lo aprovecha sin agotarlo.