Un meteorito atravesó a una velocidad estimada de 250 kilómetros por hora el techo de una casa en la localidad uruguaya de Maldonado (sureste), un hecho del que se han registrado menos de 15 casos en los últimos 100 años, informó hoy la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República de Uruguay.
El meteorito, de 712 gramos de peso y una densidad de 3.4 gramos por centímetro cúbico, superior al de la mayoría de las rocas terrestres según las fuentes, atravesó el techo de madera y fibrocemento de la construcción a una velocidad estimada de 250 kilómetros por hora y rompió el somier de una cama y una televisión.
Según explicó el director del departamento de Astronomía de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República (Udelar), Gonzalo Tancredi, el meteorito proviene del «cinturón principal de asteroides entre Marte y Júpiter».
Hay algunos objetos que escapan de esa zona y llegan a cruzar la órbita de la Tierra y pueden impactar contra nuestro planeta», agregó el científico con base en los estudios que se han hecho sobre este tipo de objetos.
Los hechos se registraron el pasado 18 de septiembre y la familia de la casa afectada contactó a investigadores del departamento de Astronomía de la Facultad de Ciencias de Udelar para que estudiaran la pieza.
A partir del análisis realizado, en el cual colaboraron investigadores del Museo Nacional de Río de Janeiro (Brasil) y del Instituto de Ciencias Astronómicas, de la Tierra y del Espacio de San Juan (Argentina), el meteorito se clasificó inicialmente como «rocoso del tipo brecha».
Tancredi indicó que básicamente existen dos tipos de meteoritos: los metálicos y los rocosos.
Los primeros son más densos y están compuestos, principalmente, de hierro y níquel, mientras que los rocosos tienen silicatos y una menor proporción de hierro y níquel.
En cuanto a lo de «tipo brecha», el científico dijo que se debe a que su estructura interior es «totalmente fragmentada».
Actualmente se está realizando un análisis químico y petrológico del objeto con el fin de establecer una clasificación más específica de la pieza, la cual aportará más información acerca de su «origen y su edad».
El fragmento presenta un «leve magnetismo al ser atraído por un imán» -debido a la presencia de hierro- y tiene una costra negra en su superficie, fruto de las altas temperaturas al ingresar en la atmósfera a más de 11 kilómetros por segundo y ser frenado por el aire, lo cual produjo la fusión de la roca.
Además, entre otras características, en la superficie presenta marcas similares a huellas de dedos, denominadas ‘regmagliptos’, que son producidas por el moldeado de flujos de aire caliente sobre la roca.
Según la Facultad de Ciencias de la Udelar, en los últimos 100 años se han registrado menos de 15 casos en todo el mundo en los que un meteorito afecta a una construcción, como el caso ocurrido en la ciudad de San Carlos, en la localidad de Maldonado.
Por las características de la roca es de esperar que fuese parte de una roca mayor que se fragmentó al ingresar a la atmósfera, por lo que se realizó una primera búsqueda de más fragmentos en un radio de tres o cuatro kilómetros alrededor de la casa, aunque de momento no se han encontrado más, indica el texto remitido por el centro académico.
Fuente Excelsior