El Grupo Parlamentario del Partido Nueva Alianza, en voz de su Coordinador Gustavo Martínez Aguirre, envió un exhorto al Poder Ejecutivo Federal, al H. Congreso de la Unión, al Poder Ejecutivo de nuestro Estado, a los 67 Ayuntamientos que lo integran, así como al propio H. Congreso del Estado de Chihuahua para que dentro de los proyectos de presupuestos para el ejercicio fiscal del 2016 se solicite un incremento para fortalecer el financiamiento educativo.
México está lejos de dar cumplimiento a las recomendaciones señaladas por la UNESCO que puntualiza que sus países miembros dediquen sus presupuestos gradualmente mayores al ramo educativo, hasta destinar no menos del 8 por ciento del Producto Interno Bruto del país, al contrario no estamos alejando en la práctica de la prioridad presupuestaria que debe tener la educación continuó el Diputado Gustavo Martínez Aguirre.
La reciente Reforma Educativa prevé dentro de sus fines, hacer realidad el derecho a una educación de calidad de manera incluyente. Nuestra prioridad es garantizarla y convertir en hechos el derecho de los niños y las niñas de México.
Para el año 2016, de acuerdo al presupuesto de egresos presentado por el Presidente de la Republica Enrique Peña Nieto, el presupuesto que se aplicara al gasto nacional asciende a 4,746,945,7000,000, de los cuales se invertirán al ramo de educación 293 millones de pesos 212.7, teniendo una disminución de -4.6 por ciento respecto del ejercicio del 2015. Cuyo gasto que se aplicó al gasto nacional asciende a 4,676,237,100,000, de los cuales se invirtieron al ramo de educación 305,741,576,291, que es el equivalente al 6.54% de ese total nacional proyectado.
Según el OCDE el gasto anual promedio por estudiante desde la educación primaria hasta la superior es del 19% del PIB per cápita; el segundo promedio más bajo dentro de la OCDE y países asociados, y muy por debajo del de la OCDE del 27%. Por el contrario, el gasto que hacen los hogares mexicanos cuando hay estudiantes en estos niveles de educación está entre los más altos de los países de la OCDE. En promedio, los hogares mexicanos cubren el 17.3% del gasto total en instituciones educativas en estos niveles.
Se debe dejar de ver al sector educativo como un tema estratégico o político, y en los hechos, vemos uno de los ejes del desarrollo social sin el cual no se pueden articular los otros factores productivos, que se le provee solo de lo que es posible, y no de lo que es deseable; La prioridad presupuestaria de la educación, es la mejor manera de garantizar el derecho al desarrollo social y económico de todos los ciudadanos, finalizó el Legislador Gustavo Martínez Aguirre.