Con base en perfiles genéticos y huellas encontradas en latas de refresco y colillas de cigarro, entre otros objetos, la PGR corroboró hace semanas que Édgar Coronel Aispuro, cuñado de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, fue uno de los principales operadores de su fuga del penal federal El Altiplano el pasado 11 de julio.
La información se corroboró tras la detención del hermano menor de Emma Coronel Aispuro, la esposa del Chapo Guzmán.
Incluso, hoy se sabe que aquel 11 de julio, día de la evasión, Édgar esperó a su cuñado en la boca del túnel que mandó construir hasta su celda, la número 20 de la zona de máxima seguridad del penal, y viajó con él, en la misma avioneta cessna pilotada por Héctor Ramón Takashima Velázquez, hasta al norte del país, al llamado “triángulo dorado”.
Según los registros inscritos en el expediente PGR/SEIDO/UEIDCS/348/2015, Édgar Coronel Aispuro es el hermano menor de Emma Coronel Aispuro y desde ahora se sumó a lista de familiares de ésta que están presos, entre ellos su padre Inés Coronel Barrera y su otro hermano Inés Coronel Aispuro.
De acuerdo con autoridades de la PGR, la labor de Édgar en la fuga del Chapo Guzmán era la de organizar la logística de las horas finales del escape.
“Ello habla de la cercanía y confianza que el Chapo Guzmán tiene con su cuñado”, dijeron autoridades federales consultadas.
Además, Édgar participó directamente en la supervisión de la construcción del túnel de 1.5 kilómetros, cuyo tiempo de construcción fue entre seis y ocho meses, según los testimonios recabados por la propia Procuraduría.
Sobre la logística de construcción, ya se logró revelar que Édgar llevó a las personas que construyeron, en inmediaciones del penal El Altiplano, una vivienda y desde ahí el túnel de la fuga.
Iban de varios estados, principalmente de Sinaloa y trabajaron día y noche, en tres turnos de ocho horas cada uno.
Los peones que hicieron la obra también ya están plenamente identificados, algunos de ellos con las misma técnica de extracción del perfil genético y en cualquier momento podrían ser detenidos.
Hasta ahora, la PGR ha detenido y consignado a 34 personas, seis de ellas fueron puestas a disposición de la PGR en las últimas horas, entre ellos está también Lázaro Araujo Burgos, éste último el “cerebro” en el proceso de construcción no sólo de éste túnel, sino también de decenas de ellos a través de los cuales el capo trafica droga a Estados Unidos.
Los otros detenidos recientemente son Calixto Estrada Castillo, quien simuló la venta del predio donde se construyó el túnel; así como Rigoberto Martínez Dávalos o Francisco Ramírez León, el comprador del terreno.
También fueron detenidos Héctor Ramón Takashima Velázquez, piloto de mayor confianza del líder del Cártel de Sinaloa, también buscado por la DEA, y el piloto Romano Laciani Llanes, quien hizo un vuelo simultáneo al del Chapo para, en un caso de emergencia, despistar a las autoridades.
El más reciente de los detenidos es el coordinador de abogados del Chapo, identificado como Óscar Manuel Gómez Núñez, quien junto con Édgar, el cuñado de Joaquín Guzmán, coordinó toda la logística de la fuga, considerada ya como la más aparatosa del nuevo siglo. El pasado miércoles, en conferencia de prensa, la procuradora Arely Gómez dijo, sin mencionar su nombre, que el abogado “es la persona que constantemente ingresaba al penal para recibir instrucciones e informar de los avances de la fuga, así como contactar y transmitir órdenes a todos los participantes”.
Fuente Excélsior