Conecta con nosotros

Revista

De fenómeno viral a descubrimiento científico: el logro del #IceBucketChallenge

Published

on

Remontémonos a 2014, al año de la famosa selfie de Ellen DeGeneres en los Óscar, el sombrero gigante de Pharrell y el Ice Bucket Challenge. Esas modas «rompieron el internet» (frase que también se acuñó en 2014) y dominaron las redes sociales en todo el mundo.

Sin embargo, uno de estos momentos virales de la cultura pop es aún más relevante hoy.

La campaña que exhortó a millones de personas a vaciarse cubetas de agua helada en la cabeza recaudó suficiente dinero como para hacer un importante descubrimiento científico, según anunció la ALS (Amyotrophic Lateral Sclerosis) Association el lunes 25 de julio.

En el enorme movimiento de recaudación, 17 millones de personas publicaron videos en internet y montones de celebridades como Bill Gates y Steph Curry se empaparon para crear consciencia sobre la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), también conocida como enfermedad de Lou Gherig.

La enfermedad provoca que las neuronas y la médula espinal se deterioren gradualmente. En la mayor parte de los casos, entre dos y cinco años después del diagnóstico, los pacientes pierden la capacidad de respirar, lo que provoca la muerte.

En tan solo ocho semanas, se donaron 115 millones de dólares (unos 1,725 millones de pesos) a la ALS Association, de los cuales se destinó 67% a la investigación para encontrar tratamientos y una cura, según reportes de la organización no lucrativa.
Se destinó un millón de dólares al Project MinE, un proyecto de la Facultad de Medicina de la Universidad de Massachusetts en el que se logró identificar un gen responsable de esta enfermedad degenerativa.

El gen, identificado como NEK1, es otro blanco potencial para el desarrollo de las terapias y acerca a los científicos al tratamiento de este trastorno neurológico.

«El análisis sofisticado del gen que propició este hallazgo fue posible gracias a la gran cantidad de muestras existentes de ELA», dijo Lucie Bruijin, directora científica de la ALS Association. «El Ice Bucket Challenge permitió que la ALS Association invirtiera en el Project MinE para crear grandes depósitos de muestras biológicas de ALS diseñados para permitir precisamente esta clase de investigaciones y para producir exactamente esta clase de resultado».

Este es el tercer gen relacionado con la ELA que los investigadores descubren con el dinero del Ice Bucket Challenge, según la organización. El descubrimiento es único porque el proyecto en el que se encontró el gen está a cargo de una persona que tiene ELA.

A pesar de que recibió críticas por el desperdicio del agua y se le minimizó por considerarlo una forma de «activismo fácil», muchas personas consideraron que el Ice Bucket Challenge era una campaña de una comunidad apasionada que aprovechó la recaudación de fondos de persona a persona y el activismo.

 

 

CNN

Revista

SocialMediaCUU explica porqué las redes sociales son trascendentales en las elecciones

Published

on

By

Los datos que proporciona el INE respecto de la lista nominal, es decir, la lista de personas que ya tienen credencial para votar, muestra un porcentaje muy amplio de gente joven que votará por primera vez. Entre sus principales características está el hecho de que utilizan principalmente medios digitales para informarse y, por su número, representan un valioso mercado para todos los partidos políticos.


 

En la lista nominal se cuentan poco más de 98 millones de personas, al corte de febrero de 2024. Así, en el país existen poco más de 15 millones de personas inscritas entre los 18 y 24 años; es decir, primovotantes, lo que representa el 15% del total.

Si sumamos a la población millennial y centennial, es decir, todas las personas de 18 a 39 años inscritas, tenemos a casi 47 millones, que representan al 48%, es decir, prácticamente la mitad del universo de votantes.

Las cifras son claras: 15 millones de personas que no han participado jamás en un proceso electoral presidencial (y posiblemente en ningún otro) y que, estadística e históricamente, no tienen una preferencia política definida, pueden inclinar la balanza a favor de cualquier candidata o candidato; y casi la mitad de la lista nominal utiliza Internet y medios digitales para enterarse de las propuestas de las y los actores políticos.

De acuerdo con los últimos datos disponibles de la Encuesta Nacional Sobre Disponibilidad Y Uso De Tecnologías De La Información En Los Hogares (ENDUTIH), en el país existen 93 millones de internautas, siendo la franja de edad de los 18 a los 34 años, la que más se conecta a la red. Por otro lado, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) muestra que las audiencias de radio han bajado a un 8.9% del universo de personas que pueden recibir una señal y las de televisión, a 14.1%. Para radio, las audiencias principales se encuentran en el rango de edad de 35 a 44 años, y las de TV se sitúan en 45 años o más.

Y es en este sentido en donde se plantea la problemática de las leyes electorales, ya que se tienen medios tradicionales como la televisión, la prensa impresa y la radio sobrerregulados, que incluso llevaron al INE a convertirse en una especie de central de medios gracias a la excesiva espotización; no obstante, los medios digitales, los más consultados por un enorme segmento de la población, no fueron tomados en cuenta en las normativas actuales.

Las plataformas digitales se convierten en una especie de tierra sin ley que permite a partidos y actores políticos realizar prácticas no éticas sin temor a sanción alguna ya que no solo no se contemplan acciones de comunicación política digital o fiscalización adecuada, además las normativas vigentes solo son aplicables a autoridades, actores y partidos políticos, no obstante, cualquier persona puede hacer una campaña electoral utilizando redes sociales y plataformas digitales.

De ahí la necesidad de crear marcos legales que permitan que las y los ciudadanos puedan elegir de manera libre, autónoma y sin cohesión a sus gobernantes, ya que tal y como se encuentra el panorama normativo electoral, la posibilidad de crear estrategias al marco de la ley para favorecer o entorpecer las campañas es muy alta, frente a un riesgo prácticamente nulo.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto