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Resto del mundo

Coca-Cola mostró su apoyo a los latinos en conmovedor comercial

La comunidad latina en Estados Unidos y en todo el mundo atraviesa momentos difíciles, ya que muchas de las políticas migratorias del presidente Donald Trump podrían afectar a miles de familias.

Desde la orden ejecutiva de construir el muro, mexicanos, latinos y gente de todo el mundo ha mostrado su apoyo a esta comunidad, por lo que un conmovedor comercial de Coca-Cola resurgió en redes sociales como muestra de apoyo.

‘¿Qué significa ser latino?’, es la pregunta que conforma todo el video que se lanzó en 2015 como parte de una campaña para latinos en Estados Unidos.

En el video se celebra la cultura latina y en esta ocasión en específico el apellido, que como menciona el video ‘hay muchas cosas que hacen sentir orgullosos a los latinos, pero hay algo que lo dice todo: el apellido’.

‘Hay una herencia y legado que viene con el apellido. Cuando pienso en el, pienso en mi padre’, expresa una persona en el video.

En el video se muestra ‘The Coca-Cola tatto can’, donde en varias latas de Coca Cola aparecían impresos diferentes apellidos latinos, como Reyes, García Rodríguez, y tenían la posibilidad de imprimirlos en su piel, como tatuajes temporales.

Detrás de cada apellido hay una historia, no todo viene fácil para nosotros. Ser latino es sentirse orgulloso, trabajar duro, superar los momentos difíciles y mantener la fe, es ser optimista, es ser cariñoso, es amar.

En su momento Coca-Cola utilizó el hashtag ‘#OrgullosoDeSer (inserte aquí apellido, origen, raza)’ para que la gente mostrara el orgullo y la diversidad que existe alrededor del mundo, así como un sentido de unidad tan necesario en estos días.

Excelsior

Deportes

Dodgers se enfrentan al ICE: rechazan uso del estadio como base para redadas migratorias

En un acto sin precedentes, los Dodgers de Los Ángeles negaron este jueves el acceso a vehículos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) a los estacionamientos del Dodger Stadium, en lo que representa una clara postura frente a las redadas migratorias que han estremecido a la comunidad latina en California.

La organización deportiva, considerada uno de los símbolos más influyentes de la ciudad, emitió un mensaje contundente a través de su cuenta oficial en X: “Esta mañana, ICE agentes llegaron al Dodger Stadium y solicitaron permiso para acceder a los estacionamientos. La organización les negó la entrada. El juego de esta noche se jugará según lo programado.”

Fuentes locales señalan que los vehículos del ICE —algunos adaptados para operaciones logísticas y detenciones— habían intentado establecer una posible área de concentración temporal cerca de la Puerta E, en Elysian Park, como ha sucedido en otras zonas como Hollywood o Pasadena. Sin embargo, la administración del equipo, respaldada por el carácter mayoritariamente privado del inmueble, ejerció su derecho de admisión para frenar el intento.

Parte del terreno del estadio sigue en manos del expropietario Frank McCourt, pero la decisión final fue consensuada dentro de la directiva del club, que ha enfrentado presión en días recientes para asumir un rol más activo frente a las detenciones migratorias.

Ese mismo día, se esperaba que los Dodgers presentaran un plan de apoyo a organizaciones que brindan asistencia a inmigrantes afectados por redadas. Lo ocurrido marca, según activistas y medios locales, “la primera respuesta contundente” del club en defensa de su afición migrante, históricamente base fundamental de su identidad y legado.

Alrededor de dos decenas de manifestantes se congregaron de manera pacífica frente al estadio para exigir el retiro del ICE y mostrar solidaridad con las comunidades afectadas. La Policía de Los Ángeles (LAPD), a solicitud del equipo, mantuvo a los manifestantes fuera del acceso principal.

La concejala Eunisses Hernández, en declaraciones posteriores, criticó la presencia de ICE en zonas cercanas al estadio y celebró la decisión de los Dodgers al señalar: “Propiedad privada es diferente. Pueden decir: ‘no en mi propiedad’.”

También hubo pronunciamientos dentro del vestidor. El pelotero puertorriqueño Kiké Hernández expresó públicamente su respaldo a la comunidad migrante, sumándose al mensaje de inclusión que la organización ha querido reforzar.

Pese a la tensión, el encuentro entre Dodgers y Padres se celebró sin contratiempos, con gradas llenas y sin alteraciones en el campo. Pero el gesto del club no pasó desapercibido: en una ciudad donde la inmigración es parte esencial del tejido social, los Dodgers han decidido no quedarse al margen.

Lo sucedido podría marcar un precedente sobre el papel que equipos deportivos pueden asumir ante políticas migratorias controvertidas. En un momento donde el deporte y la política se entrelazan más que nunca, los Dodgers no solo jugaron un partido este jueves: también fijaron una postura.

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