The Mandel Group (TMG), la empresa que llevaba los negocios de Johnny Depp, presentó este lunes en sede judicial los correos que intercambiaron con su representado como prueba de que el actor estaba dispuesto a desprenderse de muchas de sus pertenencias para hacer frente a su complicada situación financiera. Este movimiento trataría de evitar que sus antiguos gerentes, Joel y Robert Mandel, puedan ser citados como parte del caso tras la demanda que la estrella interpuso a principios de este año en la que les reclamaba 23 millones de euros y, además, les acusaba de incumplir durante 16 años el pago de impuestos fiscales.
Entre los documentos presentados por la compañía, alrededor de 109 páginas, se incluyen los correos electrónicos de TMG a varios miembros del equipo de Depp, entre ellos los mensajes que intercambiaron desde la firma con la estrella cinematográfica en el año 2009. “Desde el correo que te envié en septiembre, he hecho lo que acordamos, es decir, encarar la situación financiera hasta que retomases tu trabajo”, escribió Mandel el 6 de diciembre. La compañía instaba a su cliente a “tomarse las cosas con calma” con respecto a los gastos durante las vacaciones de ese año y establecer una reunión donde “pudieran ver de manera realista los ingresos y gastos y trabajar juntos para asegurar un equilibrio”. “Estoy haciendo un gran esfuerzo en los gastos de vacaciones, pero tengo que dar a mis hijos y familia una Navidad tan buena como sea posible, obviamente dentro de lo razonable”, respondió Depp.
Ante la inminente crisis financiera del actor, el protagonista de Piratas del Caribe sugiere en otro de los correos presentados la posible venta de varias de sus pertenencias. “¿Qué más puedo hacer? ¿Quieres que venda obras de arte? ¿Quieres que venda algo más?”, preguntaba insistentemente el también productor que ofreció sus coches, bicicletas, propiedades, libros y pinturas para solucionar su situación económica.
El actor, de 54 años, intentó mantener la calma de sus representantes económicos y les advirtió de que tenía previsto empezar el rodaje de The Tourist (2010), película por la que recibió 20 millones de dólares; y que luego llegarían otros proyectos como la continuación de la saga de Piratas del Caribe, con la que ganó 35 millones, o Sombras Tenebrosas, que supuso 20 millones más para sus arcas. “Espero que la cantidad que llegue del trabajo el próximo año y los ingresos finales puedan poner todo en orden”, añadió el intérprete.
A esta batalla legal que surgió con la demanda del actor a sus antiguos administradores, le siguió una denuncia por un préstamo a Depp que este no había devuelto. Además, TMG alegó que había sido el extravagante estilo de vida del actor lo que le había llevado casi a la ruina: durante las últimas dos décadas, el actor habría estado gastando a un ritmo de 1,8 millones de euros al mes. Entre esos gastos se incluyen, según la reclamación judicial de sus exgestores, la compra de un yate por 16,6 millones de euros, 45 coches de lujo y un gasto de casi 640.000 euros al mes entre vinos, aviones privados y el mantenimiento de una plantilla de 40 personas.
El País