Hemos escuchado hasta el cansancio la canción “Movimiento Naranja”, convertida en fenómeno viral en buena medida gracias al carisma del niño huichol Yuawi López. Pero existe una razón más sutil —o quizá no tanto— por la que es tan pegajosa: otros artistas ya nos la habían cantado. Rihanna, Sam Smith, Coldplay, Taylor Swift, Ed Sheeran y un montón de músicos más tienen canciones que usan los mismos cuatro acordes que oímos en “Movimiento Naranja”. En otras palabras, algunas de las canciones más populares de los últimos años comparten el mismo esqueleto musical.
“Movimiento Naranja” está construida con los acordes Mi menor (III), Do (IV), Sol (I) y Re (V), que se repiten en el mismo orden a lo largo de la canción.
La teoría musical funciona de tal manera que no es necesario que la tonalidad sea la misma, siempre y cuando el orden de los intervalos en relación a la nota principal sea equivalente (por eso los números romanos de arriba).Entonces, si la progresión de acordes fuera La menor (III), Fa (IV), Do (I) y Sol (V), la canción sonaría prácticamente igual, sólo que algunos tonos más aguda o más grave.
¿Es una coincidencia? Por supuesto que no. Moisés Barba —autor y productor de la canción— era completamente consciente de que estos cuatro acordes están tatuados en nuestra memoria y que utilizarlos en un jingle nos haría reconocerlo al instante (de manera inconsciente, claro). Es, al mismo tiempo, genial y truculento.
Otra razón de peso es que la melodía que escuchamos en los spots de Movimiento Ciudadano es muy sencilla. En serio, muy sencilla: dos notas —mi y sol— son el 90 por ciento de la frase, de modo que nuestro cerebro no gasta demasiada energía procesando líneas melódicas complicadas.