La enviada especial de la ONU para los Refugiados, Angelina Jolie, selló hoy un acuerdo de colaboración con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, para atajar la violencia sexual en zonas de conflicto, centrado en el entrenamiento, la supervisión y la concienciación de las tropas.
En la primera visita oficial de la embajadora de buena voluntad del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) al cuartel general de la Alianza Atlántica en Bruselas, Jolie denunció el uso de la violencia sexual «como arma de guerra» y como una «herramienta creciente de conflicto e inseguridad en el mundo».
«Su uso como arma de guerra supone un problema incómodo de enfrentar para las sociedades», lamentó Jolie, para quien «ninguno de los retos que asumimos, desde conflictos civiles hasta la crisis global de refugiados, pueden enfrentarse sin prestar más atención a las necesidades y derechos de las mujeres».
En este sentido, explicó que centró su visita en conocer «el papel potencial de la OTAN en ayudar a crear una mayor responsabilidad global en la lucha contra la violencia contra las mujeres», y mencionó la necesidad de «incrementar la representación de las mujeres» en las tropas «y reforzar el entrenamiento».
Stoltenberg explicó que el acuerdo sellado abarca tres áreas: el entrenamiento, la supervisión y la denuncia de los crímenes, y la concienciación, que «ayudará a poner la violencia de género en lo más alto de la agenda, y contribuirá a cambiar comportamientos».
El político noruego defendió que la OTAN ya tiene programas extensivos de entrenamiento para soldados y civiles que operan sobre el terreno y ha desplegado «asesores de género» en sus operaciones en Kosovo y Afganistán.
Jolie, quien ha centrado su labor humanitaria en la atención a las mujeres en zonas de conflicto y ha escuchado de primera mano el relato de víctimas «jóvenes y adultas», subrayó, se encontrará con algunos de estos asesores y comandantes militares para tratar vías de colaboración.
«Vamos a analizar cómo fortalecer el entrenamiento ya existente para combatir la violencia sexual», aseguró Stoltenberg, quien destacó asimismo la necesidad de ser «más rápidos y sistemáticos» a la hora de denunciar estos crímenes para acabar con la impunidad y «llevar a los perpretradores ante la justicia».
La actriz de Hollywood, también profesora visitante sobre el asunto en la London School of Economics (LSE), destacó que «terminar con la impunidad» no es «solo una cuestión de proteger a las mujeres» sino de «valorar a las mujeres».
«Esta ha sido una pieza ausente durante generaciones en los esfuerzos por resolver y prevenir conflictos en todo el mundo. No puede haber paz y seguridad duraderas sin igualdad de derechos y participación para las mujeres en las sociedades», concluyó.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.