Un juez peruano prohibió el sábado salir del Perú por 18 meses al expresidente Pedro Pablo Kuczynski, mientras un grupo de fiscales anticorrupción allanaba sus dos casas en la capital.
Juan Sánchez, magistrado del primer juzgado de investigación, ordenó tras una sesión de poco más de una hora que Kuczynski permanezca en el territorio peruano tiempo en el cual será investigado por la fiscalía por el presunto delito de lavado de activos ligados a la firma brasileña Odebrecht.
El fiscal Hamilton Castro, que lidera la investigación, dijo que existía «la sospecha criminal» que obligaba incorporar a Kuczynski como investigado.
Añadió que era necesario indagar si Kuczynski, mientras era un funcionario clave del gobierno del entonces presidente Alejandro Toledo (2001-2006), favoreció a empresas ligadas a Odebrecht.
«El Perú desde siglo XIX asiste al triste espectáculo de que sus presidentes o expresidentes se van del país rehuyendo de la justicia u otros que retornan cuando el delito ha prescrito…esa es una razón histórica que los operadores de justicia tenemos que tomar en cuenta», añadió Castro.
César Nakazaki, abogado de Kuczynski, dijo brevemente que su patrocinado iba a aceptar el pedido del fiscal. El expresidente no asistió a la sesión.
Al mismo tiempo la fiscalía informó en su cuenta oficial de Twitter que dos fiscales anticorrupción ingresaron durante la mañana con una orden judicial a las dos casas del expresidente en Lima. Una en el barrio más rico de Lima y otra en una zona de campo en la zona sur de la capital.
Los allanamientos de los fiscales están vinculados a la investigación a la que ahora está sometido Kuczynski, un exbanquero de Wall Street de 79 años.
El viernes el Congreso aceptó la renuncia de Kuczynski, quien dimitió acorralado por las acusaciones de sus nexos con la mencionada firma brasileña.
Kuczynski no podía ser investigado mientras era presidente, un cargo que ejerció por 20 meses desde el 28 de julio de 2016.
Las consecuencias del caso Odebrecht han provocado una ola de escándalos en Latinoamérica que han golpeado a las élites políticas.
En Perú los últimos cuatro presidentes desde 2001 están investigados: Ollanta Humala (2011-2016) está encarcelado y Alejandro Toledo (2001-2006) está fugado de la justicia.