El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este jueves que usará su derecho de veto, en caso que el Senado apruebe este jueves una ley para rechazar su declaración de emergencia nacional en la frontera con México, medida que impulsa para construir su muro fronterizo. “Una gran votación de emergencia nacional realizada hoy por el Senado de los Estados Unidos sobre la seguridad fronteriza y el muro (que ya está en construcción). Estoy dispuesto a vetar, si es necesario”, afirmó Trump en mensaje en su cuenta oficial en Twitter.
La frontera sur es una pesadilla humanitaria y de seguridad nacional, ¡pero se puede arreglar fácilmente!”, reiteró en otro tuit, sobre su postura ante el posible aval sobre que los demócratas aplicarán para rechazar su declaración de emergencia. “Los demócratas son negadores de la frontera. Se niegan a ver o reconocer la muerte, el crimen, las drogas y la trata de personas en nuestra frontera sur”, apuntó.
El Senado de Estados Unidos debatirá y prevé aprobar este jueves una propuesta que busca poner fin a la declaración de emergencia del presidente Donald Trump en la frontera sur. Previo a la sesión, cinco senadores republicanos adelantaron esta mañana que respaldarán la medida avalada en febrero por la Cámara de Representantes de Estados Unidos, controlada por los demócratas para anular dicha ley. Conforme al reglamento legislativo se necesitan al menos cuatro republicanos para aprobar la medida que cuenta con el respaldo de 45 demócratas y dos independientes, de los 100 senadores que integran el Senado. Sin embargo, es poco probable que la medida se convierta en ley dado que se necesitan dos tercios de los votos del Congreso para anular un veto presidencial, que el mandatario estadunidense prometió emitir este jueves si la iniciativa se aprueba en el Senado. El conflicto político en torno a los miles de millones de dólares exigidos por Trump para construir un muro a lo largo de la frontera de Estados Unidos y México llevó a un cierre parcial del gobierno durante 35 días, que terminó en enero. En sus esfuerzos por hacer realidad su propuesta de campaña, el mandatario estadunidense intenta obtener dinero de otros programas federales para construir una barrera fronteriza que asegura es necesaria para contener la inmigración ilegal y el narcotráfico. En ese sentido, los legisladores demócratas niegan que haya una emergencia fronteriza y argumentan que las cifras de personas que cruzan la frontera ha disminuido considerablemente.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.