Conecta con nosotros

Resto del mundo

Trump amenaza a Irán con ‘sufrir mucho’ si ataca EU

El presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió este lunes a Irán de que «sufrirá mucho» si actúa contra los intereses de Estados Unidos, en un momento de fuertes tensiones entre ambos países y de roces entre Teherán y sus vecinos en el golfo Pérsico.

Si hacen algo, será un error muy grave. Será un problema muy malo para Irán si ocurre algo, eso puedo decírselo. No van a estar contentos», dijo Trump al ser preguntado sobre el aumento de tensiones en el golfo Pérsico.

Si hacen algo, sufrirán mucho. Ellos saben a qué me refiero», añadió en declaraciones a los periodistas al comienzo de una reunión en la Casa Blanca con el primer ministro húngaro, Viktor Orbán.

Preguntado por la posibilidad de una guerra con Irán, Trump recurrió a su habitual «veremos lo que ocurre».
En la última semana, Estados Unidos ha enviado al golfo Pérsico el buque de asalto anfibio USS Arlington, misiles Patriot, el portaaviones USS Abraham Lincoln y bombarderos, tras denunciar que había detectado «indicios» de planes ofensivos iraníes contra sus fuerzas en Oriente Medio.

Pese a este despliegue militar, los Guardianes de la Revolución de Irán aseguraron este domingo que no ven probable una guerra con Estados Unidos y que, en caso de ataque, tienen la capacidad de responder con firmeza.

A esa tensión se han sumado las denuncias de Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí de un sabotaje contra varios de sus barcos este domingo y lunes, respectivamente, en el golfo Pérsico.

Esas quejas de dos rivales regionales de Teherán llegaron tres días después de que la Autoridad Marítima de Estados Unidos advirtiera sobre posibles actos de sabotaje de «Irán o sus intermediarios locales» contra naves comerciales en el golfo.

Mientras los saudíes y emiratíes pedían una implicación internacional para garantizar la seguridad de las rutas marítimas, el Gobierno iraní se ha desmarcado del sabotaje a los petroleros y ha denunciado una conspiración para crear inseguridad en la zona.

La tensión en el golfo Pérsico ha aumentado desde que Washington anunció en abril el fin de las exenciones que había concedido a ocho naciones o territorios para que siguieran comprando petróleo a Irán.

Como consecuencia, las autoridades iraníes amenazaron con bloquear el estratégico estrecho de Ormuz, por el que cruza una gran parte del crudo mundial, si las sanciones impuestas por EE.UU. tras retirarse del acuerdo nuclear de 2015 impiden sus exportaciones de petróleo, vitales para la economía del país.

Debido a las sanciones estadounidenses y el fracaso del resto de firmantes de acuerdo nuclear (Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania) en contrarrestarlas, Irán informó el pasado miércoles de que suspende la aplicación de algunos de sus compromisos nucleares.

Excelsior

Resto del mundo

Colapsa el Louvre por huelga: trabajadores paralizan el museo más visitado del mundo por turismo excesivo y abandono oficial

El Louvre, emblema cultural de Francia y cuna de obras maestras universales como la Mona Lisa y la Venus de Milo, cerró abruptamente sus puertas este lunes debido a una huelga espontánea de su propio personal, que denuncia una crisis estructural alimentada por el turismo masivo, el abandono estatal y condiciones laborales insostenibles.

Miles de turistas —algunos con boletos en mano desde hace meses— quedaron varados frente a la icónica pirámide de cristal, sin explicaciones claras, formados bajo el sol parisino. La imagen fue impactante: el museo más famoso del planeta, paralizado por los mismos trabajadores encargados de proteger y compartir su patrimonio con el mundo.

«Es el gemido de la Mona Lisa aquí afuera», dijo con ironía Kevin Ward, un visitante estadounidense. «Miles esperando, sin comunicación. Supongo que hasta ella necesita un descanso».

El paro surgió sin aviso, en medio de una reunión rutinaria entre trabajadores de galería, seguridad y venta de boletos, quienes decidieron no tomar sus puestos como forma de protesta ante lo que definen como una situación “inaguantable”. Denuncian afluencias desbordadas, plantillas insuficientes y un desgaste físico y emocional permanente.

A pesar de que el presidente Emmanuel Macron anunció en enero un ambicioso plan de renovación por hasta 800 millones de euros, el personal del Louvre afirma que los problemas son actuales y urgentes. “No podemos esperar seis años para tener ayuda”, afirmó Sarah Sefian, una de las trabajadoras en huelga. “No se trata solo del arte, se trata de las personas que lo cuidan”.

El museo recibió 8.7 millones de visitantes el año pasado, más del doble de lo que su infraestructura puede tolerar. La sala donde se exhibe la Mona Lisa recibe a diario unas 20,000 personas, muchas de ellas empujadas a tomar una selfie rápida sin siquiera mirar las otras obras maestras que la rodean. “No ves un cuadro, ves celulares y empujones”, lamentó una turista coreana.

El proyecto anunciado por Macron —bautizado como «Nuevo Renacimiento del Louvre»— contempla una nueva entrada por el río Sena, una sala dedicada exclusivamente a la Mona Lisa y boletos con horario asignado. Sin embargo, los trabajadores critican que, mientras se planean reformas para dentro de una década, las subvenciones operativas del museo se han reducido más de 20% en diez años.

“No nos parece bien que el presidente venga a dar discursos aquí, mientras por dentro el museo se está cayendo”, dijo Sefian.

En una nota interna filtrada, la presidenta del Louvre, Laurence des Cars, reconoció que el edificio ya no es completamente hermético, que las fluctuaciones de temperatura amenazan las obras y que los servicios básicos para visitantes —como baños, áreas de descanso y señalización— no cumplen estándares internacionales.

La crisis del Louvre coincide con protestas contra el turismo descontrolado en toda Europa. Este fin de semana hubo manifestaciones en Mallorca, Lisboa y Venecia, donde miles de residentes salieron a las calles a denunciar el impacto del turismo sobre la vida cotidiana. En Barcelona, incluso, activistas usaron pistolas de agua contra los visitantes.

A pesar de la huelga, algunos trabajadores del Louvre podrían permitir el acceso limitado a una “ruta de obras maestras” este mismo lunes. El museo cerrará el martes, como es habitual, y se espera que el miércoles se reanuden las operaciones con normalidad, aunque todo dependerá de los avances en las negociaciones.

Por ahora, el Louvre, símbolo del arte y la historia humana, se ha convertido también en un símbolo del colapso de un modelo turístico que, sin límites ni responsabilidad institucional, amenaza con rebasar incluso los cimientos de la cultura más sagrada.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto