Son más de 145 mil contagios de sarampión los que se registran y han sido de 2 mil 758 muertos, en su mayoría niños
Este lunes 19 de agosto, la organización Médicos Sin Fronteras denunció que desde enero un brote de sarampión ha afectado a 23 de las 26 provincias de la República Democrática del Congo (RDC).
Fabrizio Andriolo, coordinador del equipo de emergencias de MSF en la RDC, declaró que desde el mes de junio se han enfrentado a la peor epidemia en años, debido a que son más de 145 mil contagios los que se registran y han sido de 2 mil 758 muertos, en su mayoría niños.
«Los 2.5 millones de dólares recaudados de los 8.9 necesarios para el plan sanitario de respuesta no son suficientes. El contraste con la epidemia de ébola en el este del país, que atrae a múltiples organizaciones y cientos de millones de dólares es alarmante», mencionó Andriolo.
Según datos de la Organización mundial de la Salud (OMS), la epidemia actual de ébola se encuentra en el noreste del país, en las provincias de Kivu del Norte e Ituri y de 2 mil 877 casos registrados, han fallecido mil 934.
«Dos meses después de la declaración oficial y pocas semanas antes del comienzo del año escolar, la epidemia de sarampión no muestra signos de desaceleración. De hecho, desde julio ha empeorado con un aumento de nuevos casos en varias provincias», declaró en un comunicado la jefa de misión de MSF en RDC, Karel Janssens.
Afortunadamente las unidades móviles han sido de mucha ayuda, los equipos sanitarios de terreno de MSF han sido capaces de llegar a lugares remotos, además de conseguir mantener las temperaturas necesarias para la vacunación, de las cuales son casi 475 mil niños de entre 6 meses y 5 años que han podido acceder a ellas.
«Existen múltiples factores detrás de esta epidemia, pero la única manera de combatirla es la vacunación. Si la población no está vacunada, habrá sarampión”, expresó Andriolo.
Para ser una enfermedad de infantes, es peligrosamente contagiosa hasta el grado de ser letal, en adultos jóvenes provoca severas complicaciones respiratorias.
Fuente: Vanguardia