Tras debatir más de tres horas, el Senado avaló cambios a las leyes Federal contra la Delincuencia Organizada, de Seguridad Nacional y los códigos Nacional de Procedimientos Penales y Fiscal de la Federación. Foto: Héctor López
Cualquier daño al fisco federal, como usar facturas falsas u operar empresas fantasma, será considerado una amenaza a la seguridad nacional.
Incluso estas últimas prácticas serán castigadas como delincuencia organizada y merecerán la prisión preventiva oficiosa.
El Senado aprobó que estos criterios entren en vigor el 1 de enero, junto con el Paquete Económico, y apliquen de manera retroactiva a los casos que hoy se investigan.
En la discusión, el PAN y el PRI alertaron del riesgo de considerar amenaza a la seguridad nacional el daño al fisco, pues equipara una omisión fiscal con delitos tan graves como el terrorismo.
Samuel García, de MC, se arrepintió de proponer que sean amenaza a la seguridad los actos ilícitos contra el fisco, ya que en tribuna dijo que era un despropósito. Su bancada, impulsora de la reforma, votó en contra en lo particular. Ricardo Monreal propuso cambios para proteger a empresarios honestos y clarificó que será delincuencia organizada cuando participen al menos tres contribuyentes y el daño al erario sea mayor a 7.8 mdp.
Excelsior