Conecta con nosotros

Resto del mundo

Sentencian a prisión a dos cantantes de K-pop por violar a una joven y compartir videos sexuales en un chat

Un tribunal de Corea del Sur condenó este viernes a los cantantes de K-pop Jung Joon-young y Choi Jong-hoon a seis y cinco años de prisión, respectivamente, por violar a una mujer y compartir el video de la escena en un chat grupal, informa Reuters.

En el caso de Jung, la sentencia también tuvo en cuenta la distribución ilegal de otros videos que filmó en secreto mientras tenía relaciones sexuales con otras mujeres, cuyas identidades han sido suprimidas para proteger su privacidad. Además, los artistas deben cursar 80 horas de educación sobre «tratamiento de la violencia sexual».

A través de un comunicado, las autoridades explicaron que los acusados, de 30 años, colaboraron entre sí para tener relaciones sexuales ilegales con una persona que estaba inconsciente o era incapaz de resistirse en 2016.

«Los acusados son famosos y amigos conocidos, pero la conversación que han tenido mostró que simplemente consideraban a las mujeres como objetos de placer sexual y cometieron delitos que eran extremadamente graves», señaló el juez Kang Seong-soo durante el veredicto.

Jung asegura que en todos los casos, las relaciones sexuales fueron consensuadas, pero admitió haber compartido los videos. Por su parte, Choi negó haber violado a la mujer e incluso argumentó que no recordaba haber tenido relaciones íntimas con ella.

Según el juez, los artistas utilizaron su fama para «atraer a las víctimas», que eran jóvenes que pretendían debutar más adelante en la industria del entretenimiento.

Las estrellas de K-pop lloraron al escuchar el veredicto final. Mientras tanto, otros dos hombres que eran parte del chat grupal donde se compartieron los videos también recibieron penas de 5 y 4 años, reportaron medios locales.

Fuente: RT

Nota Principal

Trump y Musk rompen públicamente: amenazas, acusaciones y un choque con consecuencias políticas y económicas

WASHINGTON (CNN) — Lo que alguna vez fue una de las alianzas más poderosas e influyentes en la política estadounidense ha estallado de manera espectacular. El presidente Donald Trump y el magnate tecnológico Elon Musk protagonizaron este jueves un enfrentamiento público cargado de acusaciones, amenazas de represalias económicas y hasta insinuaciones sobre el escándalo Epstein.

Todo comenzó cuando Trump expresó su “profunda decepción” con Musk tras las críticas del empresario al proyecto estrella del presidente: un gigantesco paquete legislativo republicano sobre impuestos, gasto, energía y migración. “Teníamos una gran relación. No sé si la tendremos más”, dijo Trump desde la Oficina Oval.

Musk respondió con artillería pesada desde su red social X, afirmando que Trump no habría ganado la elección de 2024 sin su ayuda y calificando su actitud de “ingratitud”. La guerra digital entre ambos se intensificó rápidamente, reflejando una ruptura total entre el presidente y uno de sus mayores donantes y aliados tecnológicos.
Del «súper asesor» a enemigo político

Musk, quien hasta hace poco ocupaba un rol especial como empleado del gobierno a cargo de la “eficiencia gubernamental”, fue clave en el diseño de la visión trumpista de achicar el aparato federal. Pero ahora, fuera del cargo, ha arremetido contra el pilar legislativo del presidente, llamando al proyecto una “abominación asquerosa” por su impacto en el déficit.

Trump, enfurecido, contraatacó amenazando con cancelar los subsidios y contratos gubernamentales de Musk, una medida que podría afectar severamente a empresas como SpaceX, Tesla y Starlink, y que incluso tendría repercusiones en la Estación Espacial Internacional.

Musk respondió con una acusación explosiva y sin pruebas: aseguró que Trump “está en los archivos de Epstein” y sugirió que ese sería el motivo por el cual ciertos documentos del caso no han salido a la luz. CNN no ha podido verificar esa afirmación ni ha recibido comentarios oficiales de la Casa Blanca.
Crisis interna para los republicanos

El magnate también se burló de la política arancelaria de Trump —diciendo que llevaría a una recesión este mismo año— y hasta se mostró abierto a respaldar un juicio político para destituir al presidente y colocar al vicepresidente JD Vance en su lugar.

La relación entre ambos ha tenido consecuencias inmediatas. Las acciones de Tesla cayeron en Wall Street tras la pelea pública, y los analistas ya especulan sobre cómo esta ruptura podría influir en futuras elecciones, dado que Musk fue el mayor donante individual conocido en las elecciones de 2024.

Algunos funcionarios de la Casa Blanca dijeron que Trump estaba “más sorprendido que enojado”, y que el distanciamiento con Musk le ha afectado emocionalmente. Sin embargo, la actitud del presidente ha comenzado a endurecerse, especialmente después de que Musk dijera: “Sin mí, Trump habría perdido”.
Una pelea con implicaciones más allá del ego

Más allá de la disputa personal, la pelea plantea dilemas políticos y económicos importantes: ¿seguirá Musk respaldando candidatos republicanos? ¿Se cortarán efectivamente sus contratos con el gobierno federal? ¿Podría esto fracturar la ya polarizada base conservadora?

En un tono melancólico, Trump evocó los días en que Musk lo apoyaba y hasta hacía campaña por él: “Elon me respaldó con fuerza. Incluso subió al escenario a hablar por mí”, dijo, visiblemente afectado. Sin embargo, también lo acusó de sufrir una especie de “síndrome de desorden anti-Trump” común entre exfuncionarios.

Por ahora, mientras los insultos y acusaciones vuelan de una plataforma a otra, una imagen de su antigua cercanía persiste: el Tesla rojo que Trump compró en un evento para impulsar el negocio de Musk aún permanecía estacionado en el camino de entrada de la Casa Blanca la noche del jueves. Un símbolo de una alianza que, al menos por ahora, parece haber llegado a su fin.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto