Con el líder norcoreano Kim Jong Un, según los informes, en grave estado después de la cirugía, surgen preguntas sobre quién reemplazará al dictador solitario, ya que no ha nombrado sucesor o heredero aparente.
Su hermana Kim Yo Jong es miembro de alto rango del gobernante Partido de los Trabajadores de Corea y es considerada la mujer más poderosa en Corea del Norte, según una investigación de Interés Nacional de 2019.
El poder tradicionalmente ha pasado por herederos varones, pero el déspota de 36 años no tiene hijos varones adultos, lo que deja al hermano y la hermana de Kim como las opciones más obvias para reemplazarlo como gobernante, según varios informes.
Kim Yo Jong, la heredera, es la jefa de propaganda del Régimen NorCoreano. Por tal, es experta en medidas activas y operaciones psicológicas de contrainteligencia!
Según el informe, se ha desempeñado como jefa de gabinete y confidente de su hermano mayor y ha sido protectora de su imagen en su papel de directora del departamento de propaganda del país.
Pero la política de Corea del Norte es patriarcal y es poco probable que una mujer se convierta en líder, por muy poderosa que sea. La esposa de Kim, ex animadora y cantante, tampoco ejerce poder político, según el informe.
Esto deja al hermano mayor de Kim, Kim Jong Chol, quien ya fue ignorado por su padre cuando estaba considerando un sucesor.
Kim Jong Un ha tomado medidas para consolidar su poder desde que ascendió al trono hace nueve años, ordenando la ejecución de su poderoso tío Jang Song Thaek y toda su familia en 2013 por cargos de traición.
Según los informes, Kim también ordenó el asesinato en 2017 de su medio hermano Kim Jong Nam, quien murió después de un ataque de agentes nerviosos por dos mujeres asesinas en un aeropuerto de Kuala Lumpur.
Pero el dictador aparentemente no considera a su hermano una amenaza, posiblemente debido al hecho de que no tiene interés en sucederlo como líder supremo.
Campos de detención: el terrible plan de Trump contra los migrantes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a encender las alarmas en el ámbito migratorio al adelantar un plan que, de concretarse, marcaría un giro radical en la política de deportaciones de Estados Unidos. Sus recientes declaraciones apuntan a la creación de un sistema masivo de detención y expulsión, respaldado por el ejército, lo que ya ha generado controversia entre expertos, activistas y políticos de todas las esferas.
Una emergencia nacional para deportaciones masivas
Trump, quien regresará a la Casa Blanca en 2025, reafirmó en la plataforma Truth Socialque su administración estaría preparada para declarar un estado de emergencia nacionalcon el objetivo de enfrentar lo que ha llamado «una invasión permitida por Joe Biden».
Esta declaración se suma a los comentarios de Tom Fitton, director de la organización conservadora Judicial Watch, quien sugirió que se utilizarían recursos militares para implementar un programa de expulsiones masivas. El expresidente respondió tajantemente: «¡Es verdad!».
El alcance de este plan incluye el despliegue de la Guardia Nacional y, si es necesario, tropas federales. «La Guardia Nacional debería ser capaz de encargarse de las deportaciones; si no, usaría el ejército», afirmó Trump en una entrevista con Time en abril.
Durante su presidencia, Trump endureció significativamente las políticas migratorias, pero sus nuevas propuestas revelan un nivel de agresividad sin precedentes. A esto se suma, la idea de establecer «campos de detención» en Texas, en donde se albergaría a los migrantes antes de ser deportados.
Texas ofrece tierras para la construcción de campos de detención masiva
La comisionada de la Oficina General de Tierras de Texas, Dawn Buckingham, ha propuesto una medida que podría convertirse en el primer paso hacia la creación de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
En una carta dirigida al presidente electo Donald Trump, Buckingham ofreció al gobierno 567 hectáreas de tierra ubicadas en el condado de Starr, cerca de Rio Grande City, para la construcción de instalacionesdestinadas a procesar, detener y deportar a migrantes de manera masiva.
Este terreno, que actualmente se utiliza para cultivos agrícolas como cebollas, canola y maíz, sería destinado a albergar campos de detención, una propuesta que ha generado gran controversia en medio del debate migratorio.
Buckingham destacó que la Oficina General de Tierras de Texas está lista para colaborar con el Departamento de Seguridad Nacional y otras agencias federales para hacer realidad este proyecto, el cual se alinea con los planes de Trump para reforzar las políticas de deportación y control fronterizo.
Sheinbaum reacciona a deportaciones masivas y campos de detención
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su desacuerdo con laspolíticas migratorias propuestas por Donald Trump, especialmente en relación con la posible deportación masiva de migrantes y la construcción de campos de detención en la frontera sur de Estados Unidos.
Durante su conferencia de prensa mañanera, Sheinbaum destacó que su gobierno no acepta que los migrantes sean tratados como criminales, subrayando que existen instituciones de justicia para abordar estos temas de manera adecuada.
«Primero, evidentemente no estamos de acuerdo en que se trate a los migrantes como criminales, para eso existen las instituciones de justicia en cualquier lugar del mundo», afirmó la mandataria, quien también enfatizó la relevancia de la contribución de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
En este sentido, Sheinbaum detalló que su administración tiene cuantificados los beneficios que estos migrantes aportan al país vecino, tanto a nivel laboral como en términos de impuestos.
Como parte de las preparaciones para un posible cambio de administración en Estados Unidos, Sheinbaum informó que su gobierno trabaja en un plan para enfrentar la eventualidad de deportaciones, asegurando que, en caso de que se den, México está listo para recibir a los connacionales deportados.
«En caso de que hubiera deportaciones nosotros vamos a recibir a las y los mexicanos, tenemos un plan para ello, pero vamos a trabajar previo a ello que no tienen por qué deportarse a nuestros connacionales, que al contrario, benefician incluso la economía de Estados Unidos», añadió.
Además, la mandataria anunció que, en los próximos días, se celebrará una reunión con su gabinete para definir los temas clave que se tratarán con el equipo de Trump una vez que este asuma la presidencia, entre los que se incluyen la seguridad, el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), así como cuestiones culturales y de amistad bilateral.