El desabasto de medicamentos oncológicos en el país incrementó 188% en el segundo cuatrimestre del año, periodo en el que la falta de insumos de salud se mostró más en los casos de las enfermedades crónicas con mayor prevalencia en el país, como diabetes, hipertensión y artritis.
“Se corrobora con evidencia la falta sistemática, en sector público y privado, de más de una docena de medicamentos oncológicos, con la gravedad que este desabasto puede tener en el progreso de dicha enfermedad en los pacientes con cáncer”.
El último reporte presentado por el colectivo Cero Desabasto, impulsado por Nosotrxs, en cuya elaboración colaboró Fundar Centro de Análisis e Investigación y diversas asociaciones, puntualiza: “El desabasto de medicamentos en pacientes oncológicos ha tenido un repunte dramático de casos (+188%) durante el periodo analizado (el segundo cuatrimestre)”.
Indica que de ese incremento de 188% de casos de desabasto reportados por pacientes con cáncer entre mayo y agosto, cerca de 40% corresponde a mujeres con cáncer de mama que no han recibido de oportunamente sus medicamentos y quimioterapias –Fulvestrant, Denosumab y Ciclofosfamida–, seguido de casos de pacientes con leucemia linfoblástica aguda y mieloma múltiple –falta de Vinicristina y Palonosetrón, respectivamente–.
El informe refiere que el no surtimiento de medicinas es más común en quienes padecen enfermedades crónicas y de mayor prevalencia en el país, como diabetes (23%), hipertensión (15%) y artritis (3%), además de los males de alto costo, precisamente como cáncer (31%), VIH (15%), epilepsia (4%), Parkinson (3%) fallo o insuficiencia renal (3%).
Cero Desabasto señala que, en cuanto a las instituciones de salud con más casos de este tipo en el segundo cuatrimestre de este año, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) registró el mayor número de reportes, con 45%, seguido por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), con 39%, y el Instituto de Salud para el Bienestar, Insabi, con 11 por ciento.
Fuente: Excelsior