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México

Busca AMLO desestabilizar la alianza PRI-PAN-PRD con nombramientos

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El posible nombramiento de Quirino Ordaz Coppel, gobernador de Sinaloa, como embajador de México en España ha causado reacciones dentro de la política mexicana, como es el caso de Jesús Zambrano, líder nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), quien lo ve como un «pago».

A través de Twitter, Jesús Zambrano declaró que el ofrecimiento del presidente López Obrador a Quirino Ordaz Coppel sólo tiene una lectura: «el pago por la entrega de la elección al crimen organizado. La gente de Sinaloa lo va a sufrir pronto en carne propia», declaró.

Recordemos que durante una visita de trabajo, el pasado viernes 10 de septiembre, AMLO dijo que Quirino Ordaz Coppel se integraría al gobierno federal; un día más tarde, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) anunció que iría a la Embajada de México en España.

Jesús Zambrano no sólo lo ve como un «pago», sino también como una estrategia de AMLO para presuntamente desestabilizar a la oposición reunida en la coalición Va Por México, «busca desmoralizar a la ciudadanía que votó por la alianza y a la propia militancia», escribió en Twitter.

Postura que también comparte Alejandro Moreno, líder del PRI, quien aseguró que AMLO busca acabar con la coalición Va Por México; aparte, anunció posibles sanciones contra Quirino Ordaz en caso de que acepte el cargo como embajador. 

La designación de Quirino Ordaz Copppel aún no es oficial, pues la SRE envió una iniciativa al Senado de la República para que sea aprobada; además de una solicitud al gobierno de España, para que el aún gobernador de Sinaloa pueda formar parte del servicio exterior.

No es el único político de la llamada oposición al que AMLO ha invitado a formar parte del gobierno federal, pues también lo hizo con Antonio Echevarría, gobernador de Nayarit y que es militante del PAN. 

México

Senado aprueba Ley General de Aguas en medio de acalorado debate y críticas de oposición

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El Senado mexicano aprobó este jueves, con 85 votos a favor y 36 en contra, el proyecto de decreto que expide la Ley General de Aguas y reforma diversas disposiciones de la Ley de Aguas Nacionales, en un contexto de creciente presión sobre los recursos hídricos del país por sequías, conflictos por concesiones, crecimiento urbano y alta demanda del sector agrícola.
La minuta fue remitida al Senado por la Cámara de Diputados, que la aprobó tras 24 horas de acaloradas discusiones. La iniciativa deriva de una propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum para regular el derecho humano al acceso, disposición y saneamiento del agua, así como priorizar su consumo humano y doméstico ante autorizaciones, permisos, concesiones y asignaciones del recurso.
El senador Óscar Cantón Zetina, de Morena, aseguró que el centro de este proyecto es la persona y no los grandes acaparadores de agua, pues se crea un trinomio virtuoso entre tierra, agua y gente. Afirmó que la legislación es la mayor aliada de los productores y campesinos de México, ya que elimina la visión mercantilista del agua y la regresa a su dueño legítimo, que es el pueblo de México.
La senadora del PAN, Verónica Rodríguez, señaló que esta reforma convierte el agua en un instrumento de manipulación política y electoral. Apuntó que le da al gobierno federal la posibilidad de decidir de manera discrecional quién mantiene su concesión, quién la pierde, a quién le reducen volúmenes de agua y a quién sí le permiten operar, lo que demuestra que es peligroso para la democracia, el campo, la seguridad alimentaria y las familias.
Carolina Viggiano, del PRI, advirtió que el proyecto no contó con estudios económicos ni presupuestales, no cuenta con análisis de impacto financiero y tampoco se asegura inversión para la infraestructura, operación ni vigilancia de los sistemas de agua. Además, señaló que no se consultó a los pueblos originarios.
Luis Donaldo Colosio, de Movimiento Ciudadano, indicó que los cambios abren la puerta a más control gubernamental sin contrapesos reales, a más trámites y a más incertidumbres para el campo mexicano. Afirmó que se concentran atribuciones en la Comisión Nacional del Agua sin reglas claras, crece el riesgo de arbitrariedad, corrupción, favoritismos y castigo político, además de que se crea incertidumbre en la asignación de derechos y volúmenes, lo que desincentiva la inversión, la tecnificación y frena proyectos.
La nueva Ley General de Aguas establece que las concesiones para el uso del vital líquido no podrán ser intercambiadas entre particulares, con la obligatoriedad de que sea la Conagua la que las distribuya de nuevo.
La discusión y aprobación en las Cámaras de Diputados y Senadores ocurre en un contexto donde el sector agrícola consume cerca del 75 por ciento del agua disponible para consumo en el país.

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