Conecta con nosotros

Acontecer

Regreso de escultura de Santiago Apóstol a Izúcar

Published

on

La pieza se dañó tras el sismo del 19 de septiembre del 2017, ya que se le cayó encima la cúpula de la parroquia

La Secretaría de Cultura federal, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), informó que el próximo lunes 24 de octubre la escultura colonial de Santiago Apóstol regresará a Izúcar de Matamoros, Puebla, luego de casi cinco años de permanecer en las instalaciones de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNCPC), en la Ciudad de México, donde fue ingresada con severos daños el 4 de diciembre de 2017, debido al sismo del 19 de septiembre de ese año.

El INAH llevará a cabo la entrega formal de dicha escultura, el “santo patrono de Izúcar”, que se convierte en “ícono de la recuperación del patrimonio cultural afectado por los eventos sísmicos de ese año”, según informan en el comunicado.

La información compartida por la dependencia refiere que, actualmente, entre cuatro y cinco restauradoras trabajan, de manera simultánea, en la reintegración cromática de la escultura con pinceles y técnicas específicas completan las formas del diseño, los contornos de las florituras que cubren la armadura de hoja de oro: escarpe, greba, peto y espaldar.

 

La coordinadora de esta intervención, ejecutada en el Laboratorio de Conservación de Escultura Policromada de la CNCPC, Roxana Romero Castro, habla sobre el resultado de este trabajo, sobre todo, tras recordar en fotografías el estado en que llegó “Santiaguito”, luego que le cayera encima la cúpula de su parroquia: un amasijo de fragmentos de pasta de caña de maíz, que lograron permanecer dentro de la indumentaria que portaba.

La restauradora advierte que la práctica de vestir al santo, al igual que pasarle trapo húmedo para limpiarlo, colocarle cerca jarrones con flores y veladores, entre otros hábitos, provocan la pérdida de la hoja de oro y la capa pictórica, además de que generan un microclima poco favorable para su conservación. Con un manual para su mantenimiento, que se entregará ese día, se insta a apreciar la belleza real de la obra, tal cual fue concebida entre finales del siglo XVI e inicios del XVII.

Explica que la reintegración cromática concluye un trabajo multidisciplinario e interinstitucional que giró sobre tres ejes: el estudio antropológico de la comunidad, para identificar los actores sociales interesados en el “Señor Santiago” y comprender cómo se relacionan con él; la caracterización de técnicas y materiales constitutivos de la pieza, además de la ejecución de los procesos de restauración, con base en una profunda investigación sobre esculturas ligeras.

 

Pese a sus poco más de 2.60 metros de altura, la escultura no rebasa los 40 kilogramos, al haber sido manufacturada en papel amate y pasta de caña de maíz, material que fue repuesto, en cierto porcentaje, por su mal estado, resultado de la humedad y del impacto que recibió; los estratos decorativos fueron rescatados mediante tratamientos preventivos y de estabilización que ayudaron a recuperar su volumen.

La experta de la CNCPC, señalan en la tarjeta informativa, que una de las innovaciones de esta intervención fue el diseño de una estructura reticulada interna, hecha con madera de cedro, en colaboración con el arquitecto Arturo Casasola, que sirvió de eje para la unión de cada una de las partes del cuerpo escultórico, a la vez que de auxiliar en su manipulación.

Una vez integrada la escultura –dice Romero Castro–, empezó su recuperación formal mediante la reposición de material de soporte y la recolocación de estratos desprendidos. La fase final ha comprendido la reposición de la continuidad de la superficie mediante resanes, y la reintegración cromática, atendiendo al principio de mínima intervención, con el uso de materiales reversibles, estables y compatibles con el original; además de una restitución de la hoja metálica y las formas decorativas de la imagen, basada en las innumerables fotografías facilitadas por la feligresía.

La coordinadora del proyecto de restauración recuerda que el “Señor Santiago” es parte de un conjunto escultórico, junto con su cabalgadura –la cual fue imposible rescatar–. Mientras se realizan las gestiones para elaborarle una nueva, se colocará sobre un soporte, creado especialmente por personal de la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones del INAH.

En esta iniciativa, concluye, un equipo de hasta 15 especialistas logró aplicar su conocimiento, metodología y técnicas para resolver un reto de restauración-conservación, de manera que, “más allá de la materia, se ha logrado recuperar un eslabón fundamental de la estructura social de la comunidad de Izúcar”.

 

Fuente: eluniversal.com.mx

 

Acontecer

Georgina Ledezma vende pulseras hechas a mano. Alumna del CAM 7507

Published

on

By

Alumna del CAM 7507 del grupo de proyectos productivos, Georgina Kanakoqui Ledezma de 18 años de edad, joven alegre, entusiasta y trabajadora, con grandes habilidades para estar en un ambiente de trabajo, solicita el apoyo de la comunidad en general para que adquieran pulseras elaboradas con sus propias manos.

 


Bajo la asesoría y acompañamiento de la maestra Gabriela Rivero, en cuyas clases se desarrollan habilidades laborales con la finalidad de auto emplearse y/o realizar prácticas en ambientes reales, fue donde se gestó este emprendedurismo por parte de Georgina en la que de realizarlas como pasatiempo surgió la idea de ponerlas a la venta para generar sus propios ingresos como incentivo además, para que ella se sienta autónoma y feliz ya que debido a su delicada situación de salud no puede ejercer dentro de una empresa.
Este caso de éxito en la elaboración y convencimiento de producir artículos para su venta forma parte de los objetivos de nivel de formación para la vida adulta del CAM 7507 donde las maestras Ivone Santiago y Lydia Stirk del grupo de prácticas Laborales dan seguimiento puntual a todo su estudiantado.
Las pulseras de la joven Kanakoqui Ledezma estarán en venta en el restaurante “MAYÓLICA” ubicado en Blvd. Antonio Ortiz Mena 2033 Colonia Campestre-Lomas con un costo de $30 pesos.

Continuar Leyendo
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Más visto