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En California ya hay maquinitas despachadoras de mota

Empresarios locales presentaron ayer el primer modelo de una máquina que vende automáticamente dosis de mariguana.

La máquina, llamada Autospence, es igual a los expendios automáticos de sodas o de frituras, excepto porque incluye una ranura adicional para pago con tarjeta de crédito o de débito.

El invento toma su nombre de los dispensarios o centros de distribución de mariguana con fines terapéuticos en California, que han dejado gradualmente de funcionar, tras un operativo realizado en octubre pasado por autoridades federales.

En California, el primer estado que aprobó el consumo de la mariguana por motivos médicos, se calcula que hay 90 mil consumidores de la droga con fines terapéuticos.

El diseñador de la máquina, Joe DeRobbio, presentó la Autospence en su empresa, ubicada en el poblado californiano de Aliso Viejo.

En todos lados

DeRobbio dijo esperar que las máquinas estén disponibles en edificios, supermercados o farmacias, tal y como hoy se rentan películas en formato DVD.

La empresa que fabrica y planea distribuir las máquinas señaló en su página de internet que las Autospence aportarán orden a un tipo de negocio que hasta ahora ha sido caótico y reducirá tensiones con las autoridades.

Los usuarios de las máquinas recibirían una tarjeta con código exclusivo, como las de débito, que incluirá información sobre el médico que recetó la mariguana, los motivos y la dosis.

La máquina ofrece los datos sobre el nivel de THC -compuesto activo de la mariguana- con el que cuenta el producto, la marca que la distribuyem y la cantidad disponible a comprar.

Se calcula que en Estados Unidos existen por lo menos 12 millones de consumidores de esta droga.

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Desaparece en Disneyland y aparece días después en un bote de basura en Mexicali: el misterioso caso de Annie Encino

Una adolescente estadounidense de 16 años fue localizada con vida dentro de un contenedor de basura en Mexicali, Baja California, días después de haber desaparecido en el parque Disney California Adventure, en Anaheim. El caso ha despertado preocupación e interrogantes en ambos lados de la frontera, especialmente por el silencio mediático en México y las lagunas que aún rodean su cruce hacia territorio nacional.

Annie Kathleen Encino desapareció el pasado 20 de abril tras una discusión con su familia dentro del parque temático. Fue vista por última vez alejándose sola, lo que activó una Alerta Amber en Estados Unidos. Sin embargo, esa alerta nunca cruzó a territorio mexicano, dejando a la opinión pública del país sin conocimiento de su desaparición… hasta que la historia dio un giro tan insólito como alarmante.

Días después, una llamada anónima al 911 alertó a la policía municipal de Mexicali sobre la presencia de una menor dentro de un bote de basura. Al llegar al sitio, los oficiales encontraron a la joven en condiciones que no han sido detalladas, pero confirmaron su identidad. El consulado de Estados Unidos fue notificado de inmediato y su madre viajó a la ciudad fronteriza para identificarla y llevarla de regreso.

Hasta ahora, las autoridades mexicanas no han informado cómo fue que Annie cruzó la frontera sin documentos, sin acompañantes y sin ser detectada. Tampoco han revelado si fue víctima de trata, secuestro, abuso o si viajó voluntariamente con ayuda de terceros. La Fiscalía de Baja California mantiene abierta una investigación para esclarecer los hechos.

Lo que sí queda claro es que algo falló en los mecanismos de cooperación fronteriza. Ni la alerta internacional funcionó, ni hubo un protocolo binacional que permitiera actuar a tiempo. La aparición de una menor estadounidense en un contenedor de basura, en una ciudad donde los casos de desapariciones no son novedad, pone una vez más bajo la lupa la crisis de seguridad y el flujo irregular entre ambos países.

Mientras se esperan más detalles oficiales, el caso de Annie Encino evidencia que incluso en un entorno supuestamente seguro como Disneyland, la vulnerabilidad de los menores puede terminar en una historia digna de una serie policiaca.

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