La doble moralista comunidad chihuahuense estaría por afrontar un golpe a las «buenas costumbres» ¡Válgame Dios! Pues resulta que se le podría conceder el matrimonio a una pareja de homosexuales que luego de pedir que se les casara en el Registro Civil y su trámite fuera negado, solicitaron un amparo que fue aceptado por el juez décimo de Distrito, José Juan Múzquiz, quien ordenó que el casorio se efectúe.

El Registro Civil que negó el matrimonio entre personas del mismo sexo por no estar permitido en el Código Civil del Estado de Chihuahua, tendrá cinco días para determinar el caso; pueden apelar por el rechazo a esta unión o aceptarla sin más. Con cualquiera de las dos sopas que decidan, todo pinta a que deberá realizarse pues la Corte ya lo decidió.

Sería la primera pareja del mismo sexo en contraer matrimonio ¡en Chihuahua!, lo cual sin duda marcará un hecho histórico y un avance crucial para la comunidad lésbico-gay. Ni modo chihuahuitas, más allá de señalamientos moralistas y religiosos, ya no es posible mantenerse cerrados a un fenómeno que, por derecho, debe ser aceptado. Las personas homosexuales no dejan de ser ciudadanos ni seres humanos, como usted o como yo. Pésele a quien le pese, esa es la realidad.

La Universidad Autónoma de Chihuahua inició el Modelo Universitario de Equidad de Género que busca fomentar el respeto entre los alumnos, los profesores y la plantilla laboral de la UACh. Su rector, Enrique Seáñez Sáenz, le apuesta a la sensibilización de la comunidad universitaria para evitar cualquier tipo de discriminación y fomentar el respeto a cualquier estudiante.¡Enhorabuena!

Este miércoles llovieron manifestaciones en el Centro Histórico de la ciudad. Inconformes con la réplica del Mausoleo de Villa rechazaron rotundamente la construcción de dicha obra por carecer de sentido lógico y útil, aparte de ser carísima. Como era de esperarse, apenas y fueron unos cuantos chícharos.

Otros que también levantaron la voz fueron profesores de telebachilleratos, quienes exigen mejoras laborales pues aseguran que reciben sueldos miserables e injustos, ya que un maestro de un bachillerato normal gana hasta 10 veces más que ellos. Total, al Gobierno del Estado le llovió fuerte por todos lados.

Los que sí hicieron montón fueron los trabajadores de la Secretaría de Salud, quienes también exigieron mejoras laborales pues llevan años esperando su base para poder tener prestaciones, seguridad social -¡Trabajan en un área de salud!- y mejores sueldos, pero nomás no les llega; en su discurso desconocieron al Sindicato de la SS por corrupto, pues solo los que pagan por una plaza la obtienen.

Y ya que andamos por esos rumbos, Pedro Hernández y Sergio Piña Marshall siguen con problemas políticos y se mantienen en la cuerda floja. Algunos aseguran que el que segurito se va será el secretario, otros que Hernández, y otros que los dos se quedarán sin chamba.

Lo que sí es seguro es que habrá cambios, pues el orden debe regresar a como dé lugar a la dependencia, así que es mejor que se preparen para lo peor y vayan haciendo su colchoncito, por si las dudas.

Los que ya van de salida y sin rezongar son los funcionarios municipales, quienes ya se están saboreando las jugosas compensaciones que recibirán por haber prestado sus servicios. Marco Adán Quezada aseguró que su plantilla laboral no recibirá remuneraciones extras, solo las que corresponden a la ley, pero el que sí quiere arrasar con las arcas municipales y bien quitado de la pena es “Teto” Murguía, quien no se bastó con endeudar Juárez y querer mantener a sus guarros sin ya ser alcalde, ahora está apartando un dinerito para su salida y la de sus colaboradores.

Ya ha pasado que al término de las administraciones las cajas quedan vacías, y las nuevas deben endeudarse para poder armarla con los gastos, ¿qué no hay alguien que regule la manita de los funcionarios? Robadero hay en todas partes, pero ya estuvo. Disque ya se está planeando que algún órgano regule los créditos bancarios que piden las alcaldías, pero a ver si es cierto porque Juárez, por ejemplo, ya se quedó endeudada por varios años.

Por cierto, el gobernador César Duarte informó a los medios de comunicación que el administrador del Aeropuerto de Ciudad Juárez, Raúl Zacarías Ezzat, había sido cesado de sus labores por actos despóticos y de corrupción. La nota fue de las principales en los periódicos digitales, sin embargo, la OMA desmintió de inmediato los hechos a través de un comunicado donde aclaró que nada de esto era verdad  y que Zacarías seguía en su puesto.

Gobierno del Estado a través de su vocero, Juan Ramón Flores, corrigió el error y le echó la barra a su equipo de Comunicación Social, asegurando que se les chispoteó la información, y a quien le habían dado gas era a Alberto Espinoza Trejo, encargado de la Comandancia de la terminal aérea, que depende de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. ¡Aguas con la información!