¿Ayudan realmente a proteger a los conductores los aparatos tecnológicos “manos libres” diseñados para que los usuarios no levanten la mirada de la carretera? Aparentemente, no.
Un nuevo estudio ordenado por la asociación estadounidense del automóvil halló que estas herramientas pensadas para evitar que los conductores se distraigan, en realidad representan nuevas distracciones.
Los investigadores hallaron que, tras usar un equipo inalámbrico o herramientas que se activan por voz, el automovilista puede permanecer distraído a un nivel potencialmente inseguro durante 27 segundos. Ello a pesar de que estas herramientas permiten a los conductores enviar textos o ejecutar otras tareas con sus teléfonos u otros equipos sin apartar los ojos de la ruta.
Los conductores deben tener cuidado cuando usan sistemas activados por voz, también en momentos que parecen seguros.
La verdad es que las distracciones mentales persisten y pueden afectar la atención del conductor.